En la madrugada del último domingo, delincuentes irrumpieron en dos casas típicas del Parque de las Naciones y robaron una gran cantidad de elementos de valor, una situación que se repite y generó el airado reclamo de los organizadores de la Fiesta Nacional del Inmigrante.
Si bien el predio cuenta con un destacamento policial, parece ser insuficiente para controlar las colectividades y la zona residencial aledaña, donde también se registraron varios ilícitos durante el fin de semana.
En una vivienda de calle Andresito y Alberdi los dueños de casa escucharon ruidos y se despertaron justo cuando los desconocidos estaban forzando una de las puertas. Fue así que el propietario encendió las luces de la vivienda y los ladrones escaparon sin lograr su cometido.
Muy diferente fue la situación en el Parque de las Naciones, donde los malvivientes actuaron a sus anchas, a pesar de la custodia policial permanente que existe en el lugar. En la casa polaca forzaron una puerta y se llevaron una CPU, elementos de cocina, equipo de música y algunos electrodomésticos. Tal vez los mismos ladrones cruzaron al frente e ingresaron a un depósito de la casa ucraniana, de donde se alzaron con varias cajas de cerámica, herramientas y varios materiales de construcción.
Al respecto, el presidente de la Federación de Colectividades, Enrique Forni, opinó que “la ola de robos del fin de semana fue como el hecho cúlmine, porque hace rato que vienen robando y el predio del parque está siendo sistemáticamente saqueado. Roban, rompen los carteles y hacen destrozos”.
Visiblemente consternado por la situación de indefensión del predio, lamentó la falta de eficacia de los policías apostados en el lugar, lo que también subrayaron vecinos de las zonas aledañas.
“Tenemos un destacamento en el parque, pero parece ser inútil la presencia policial porque los hechos se repiten. Por eso, o es muy poco personal en el destacamento o el sistema de vigilancia que usan no es eficiente. Porque el saqueo y los robo persisten, al igual que el deterioro de las instalaciones”, remarcó el dirigente.

Retroceso
Los integrantes de cada colectividad trabajan ad honorem, poniendo tiempo y esfuerzo para mejorar las instalaciones y brindar buenos servicios, por lo que cada robo es un retroceso significativo.
En tal sentido, Forni mencionó que “estos hechos hacen que tengamos que gastar dinero que no tenemos en arreglar puertas y ventanas, y la situación nos está desbordando. Voy a reforzar las denuncias que hicieron los presidentes afectados, pero también pretendemos hablar con el ministro de Gobierno para pedirle alguna medida para mejorar la seguridad”.
“La realidad es que así como estamos, todo el esfuerzo que hacemos para tener mejores instalaciones y ofertas termina en manos de unos cacos. Eso no tiene ningún sentido ni se justifica tanto esfuerzo”, subrayó.
Para completar un panorama desolador, fueron los mismos perjudicados quienes alertaron a la Policía que varios de los elementos robados estaban escondidos en el mismo predio, detrás de la colectividad paraguaya. Así, se logró recuperar una CPU, un radiograbador y elementos de cocina.
“Recorriendo un poco vimos que había cosas que nos robaron que estaban escondidas, por lo que supusimos que los ladrones iban a volver. Pero lo vimos nosotros, no los policías. Entonces hicimos guardia y el lunes a la siesta aparecieron dos chicos, de 13 y 14 años; llamamos a la Policía y los agarraron. Les dimos todo servido”, contaron desde una colectividad.
Por otra parte, en los últimos días se registraron varios hechos en perjuicio de instituciones del medio. El fin de semana pasado robaron en la Escuela 237 de Barrio Norte, situada frente a la Seccional Cuarta. También irrumpieron en el Caps de San Miguel, donde se llevaron elementos de valor y generaron destrozos.

Fuente:

Territoriodigital

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