Agenda cultural
Un autor, un libro, un lugar en Misiones, una ficción unos personajes que tratan de vivir del terror y de aterrorizarnos. El autor escribe su  segundo libro sobre las historias de fantasmas (sí fantasmas) en Apóstoles, no uno, sino varios que se manejan con gran libertad y seguridad contra sus eventuales enemigos. Este es el segundo libro de Damián Pereira, que  con otros escritores formó parte del GEA  (Grupo de Escritores de Apóstoles). El presente libro se titula “Cementerio De Almas II – Los Secretos de Edgar”, y Edgar es quien aparece en la primera página, un dos de noviembre (la acción debía centrarse en el día de los muertos) y en el patio de su casa. Seguramente Edgar ha tenido protagonismo en la primer novela, pero en esta oportunidad solamente sabemos de él que tiene en su patio, cinco autos muy viejos de dueños desconocidos y  tres fantasmas que viven en esos autos y le hacen la vida imposible. Pero también hay un galpón siempre cerrado que  nadie se anima a abrir por lo que se podría hallar adentro. Se mira desde lejos con mucho miedo porque se han visto luces  en semejante oscuridad. Sin embargo Edgar tiene una  amiga que lo cuida,  Ramona,  que también  atiende a una vecina,  Anastasia. Ella incorpora, sin pensarlo , a otro personaje Genaro, argentino pero  que vivió muchos años con sus padres en Italia y que volvió al  país buscando tranquilidad, y también a un tío sacerdote, que casualmente fue llamado por Edgar para exorcizar los demonios . El P. Alessandro   que era exorcisador, no logró su cometido,  lo vencieron los demonios y desapareció para siempre .Solo volvió una vez, pero él también como fantasma. La novela tiene muchas pequeñas historias donde la muerte es protagonista. Los fantasmas terminan con otra familia que sin lástima matan. La Familia Mediondo. Los fantasmas de Edgar tienen nombre y un auto viejo asignado a cada uno, donde “ viven” y desde  donde manejan la vida de los que allí viven. La  Profesora Evelin Rucker en su Prólogo, interpreta al autor y su temática nada común, “donde el mundo de los mecanismos psíquicos, los instintos, las situaciones de omnipotencia, de agresividad, de sublimación son puestas en acción en textos de lenguaje expresionista, en un clima del más riguroso sobresalto tomando lo cotidiano como una manifestación admirable y modesta de lo absurdo”. Roger, el fantasma que maneja todo y que se cree instrumento de venganza y que ha atormentado durante toda la trama a los otros protagonistas, lee, en ese 2 de noviembre, el cap. 3 de la Sabiduría que dice “que las almas de los justos están en las manos de Dios y no les alcanzará  tormento alguno” . Este demonio en realidad –que se dice omnipotente- es vencido porque los que habían  muertos están vivos, solo sufrieron castigos de los vivos y él fue un instrumento de  Dios,  que los sometió a castigo y los halló dignos.

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