Las letras están de fiesta, el 13 se recuerda el Día el Escritor, el 15 el Día del Libro, y a partir del sábado 29 de junio, los misioneros celebran la 42 edición de la Fiesta Provincial del Libro que todos los años, desde 1978, ofrece Oberá.
Arcilla, papiro y papel
“Las tablas de arcilla o bajorrelieves en diferentes piedras fueron los primeros soportes. A los egipcios les corresponde el invento del papiro, una especie de papel fabricado con una planta que crecía a orillas del Nilo. Las láminas de papiro medían hasta 49 cm. de largo y 20 cm. de ancho. Se las enrollaba y los usaban los escribas para asentar sus escritos. Los chinos aportaron un soporte mucho más perdurable, el papel. Este invento aparece en los registros históricos en el año 105 d.C., pero es sin duda más antiguo.- El pergamino fue el sistema usado en Europa durante la Edad Media y tenía la ventaja de que se podía escribir de las dos caras. Se agrupaba en varios pliegos y se cocía formando los códices, que poco a poco fueron constituyendo lo que hoy se conoce como un libro. En esta evolución el impacto más decisivo para la humanidad fue la aparición de la imprenta. En los comienzos de la imprenta se utilizaban los incunables, pero hacia el siglo XVI se dejaron de usar. Con la imprenta llegó la democratización del acceso al saber, hoy es difícil imaginar un mundo donde se usara en forma exclusiva la narración oral para comunicar experiencias e impartir educación. En definitiva: hoy no se puede negar que el avance de la ciencia y la tecnología habría sido imposible sin la existencia del libro.
La fecha en que se celebra el Día del Escritor se debe a que un 13 de junio de 1874 nació Leopoldo Lugones en Villa María del Río Seco, Córdoba. Fue instituido por la Sociedad Argentina de Escritores (SADE), la que fuera fundada por el escritor de una proficua obra literaria, ¡como recordamos “La Guerra Gaucha”, allá, por nuestras mocedades! y de una controvertida personalidad y el que desencantado con la política argentina en la que no podía avanzar y sacudido por una infidelidad, decide terminar con su vida en una isla del Delta, en 1938.”
La celebración del Día del Libro comenzó en nuestro país el 15 de junio de 1908 como «Fiesta del Libro». Ese día se entregaron los premios de un concurso literario organizado por el Consejo Nacional de Mujeres. En 1924, el Decreto Nº 1038 del Gobierno Nacional declaró como oficial la «Fiesta del Libro».
El 11 de junio de 1941, por una resolución Ministerial se llamó a la conmemoración «Día del Libro» y se repitió la misma fecha, expresión que continúa vigente
Si bien mundialmente el día del libro es el 23 de abril; la Resolución de la UNESCO que así lo fija dice en su último párrafo “Esta Organización suscribe la idea y proclama “Día Mundial del Libro y el derecho de Autor” el 23 de abril de cada año, por ser la fecha en que coincidieron, en 1616, los decesos de Miguel de Cervantes, William Shakespeare y el Inca Garcilaso de la Vega”, en nuestro país se estableció la fecha del 15 de junio. Por las razones apuntadas anteriormente.
El honor de haber instituido ese día como “Día del Libro” tiene que ver con el Consejo Nacional de Mujeres que el 8 de octubre de 1903 formó una Comisión con el objeto de “fomentar la buena lectura y el arte de leer” la que se llamará Biblioteca del Consejo de Mujeres y que organizó una vez al año la “Fiesta del Libro” con concursos literarios, concursos de lectura en castellano y en idiomas extranjeros.
Recién en 1908 tiene lugar la primer Fiesta del Libro la que fue cobrando importancia con el tiempo, así su décimo séptima Fiesta, ya oficializada, se realiza en el Teatro Colón de Buenos Aires, y está presidida por el ministro de Justicia e Instrucción Pública, Dr. Antonio Sagarna y autoridades de la Asociación Biblioteca de Mujeres.
Fue el 17 de junio de 1924 en que el Poder Ejecutivo de la Nación dictó el Decreto N° 1038, durante la presidencia de Marcelo T. de Alvear. “Visto las actuaciones consecutivas al pedido de la Biblioteca del Consejo Nacional de Mujeres para que se declare oficial la “Fiesta del Libro” que dicha Institución celebra anualmente. Y considerando; 1.- Que la iniciativa mereció informes favorables de la Inspección General de la Enseñanza, la que aconseja se realicen en todos los establecimientos de educación dependientes del Ministerio, actos alusivos. 2.- Que es del mayor valor educativo consagrar una día especial del año a la recordación del libro como registro imperecedero del pensamiento y de la vida de los individuos y las sociedades y como vínculo indestructible de las generaciones humanas de todas las razas, lenguas, creencias…
El Decreto establece en su artículo 1) Declarase oficial para todos los establecimientos de educación dependientes del Ministerio de Instrucción Pública, la “Fiesta del Libro”, instituida por la Biblioteca del Consejo Nacional de Mujeres, y que se celebrará el 15 de junio de cada año.
Especificando que en dicho día, en los establecimientos mencionados se dedicará la última hora de clase, a conferencias, estudios analíticos o históricos o comentarios sobre los libros de mayor influencia en la humanidad y en la Patria y a concursos de lecturas de libros selectos o de libros originales de estudiantes y profesores…”
Si hemos transcripto casi en su totalidad el Decreto 1038, es para que las generaciones actuales comprueben el valor que se le dio al libro y que se le debe seguir dando, por eso todo lo que sea divulgar el libro a través de su lectura es un paso más que nos acerca a varios sueños, la cultura y la libertad del pueblo.
Cierto es que ser lector es la resultante del ejercicio continuado de la lectura y de la oportunidad de tener suerte con la elección del libro, que por algo decía Jaime Balmes “Se ha de leer mucho, pero no muchos libros; esta es una regla excelente. La lectura es como el alimento, el provecho no está en proporción de lo que se come, sino de lo que se digiere”
Lo ya escrito es suficientemente concreto para que advirtamos lo que significa el libro que será el protagonista obereño, cuando se inaugure la 42 edición de la Feria Provincial del Libro, esa buena idea que surgió en 1978 y que tuvo como ideólogo al Departamento de Letras del Instituto Carlos Linneo.
Esta Feria, y en especial el plantel femenino que integra la Comisión Permanente de la Feria Provincial del Libro, presidido en esta edición por la licenciada Emma Losas que año a año viene organizándola, merece nuestro reconocimiento comunitario y esto es así porque sin que medie interés material alguno, se viene trabajando para que cada año, sin interrupción, la Feria convoque a los libreros -algunos repiten la experiencia por años- y son ellos los que nos acercan a ese mundo maravilloso del escaparate variado en gustos y títulos que comenzará a desfilar el sábado 29, en el Gimnasio del Colegio Mariano
Además de la venta, el público puede asistir a la presentación de libros y participar de otras actividades que las hay y diversificadas y que, por otra parte, continuarán ofreciéndose post feria.
“Los libros son los pilares de la libertad de los pueblos” dijo Domingo Faustino Sarmiento, mientras Cicerón afirmó “Añadir una biblioteca a una casa, es dotar a ésta de alma” y Ricardo Corazón de León manifestó “Los libros me enseñaron a pensar y el pensamiento me hizo libre”
Oberá y la cultura están de fiesta.