Las precipitaciones de los últimos días generaron un importante deterioro en diferentes arterias, situación que incrementó los reclamos por el mal estado de los caminos terrados en sectores urbanos y rurales de esta localidad.
Al respecto, colonos y vecinos del paraje Guayabera lamentaron el pésimo estado de los caminos vecinales, lo que dificulta la salida de las chacras y el traslado de la producción a los centros de acopio.
Se trata de una zona netamente productora del municipio de Oberá.
Sin embargo, por encontrarse en límite con los municipios vecinos de General Alvear y Colonia Alberdi, históricamente hubo discrepancias sobre la jurisdicción que cubre cada una de las comunas y los pobladores se sienten rehenes de la indefinición política de los sucesivos gobiernos.
“El reclamo pasa por el estado de los caminos principales, por donde se saca la producción. Esta es una zona productora de té, yerba, pino y hay algunas olerías”, se quejó el productor Esteban Márquez.
En diferentes tramos del paraje Guayabera las huellas del camino pasaron a ser profundos zanjones y las malezas ganaron espacio.
Salvo en motos o camionetas 4×4, varios sectores quedaron intransitables y también dejó de pasar transporte de pasajeros, lo cual incrementa el perjuicio para la gente de la zona.
En ese contexto, muchos vecinos deben caminar varios kilómetros para tomar un colectivo, mientras que los colonos están obligados a realizar rodeos por caminos alternativos para sacar la producción de las chacras.
“Los camiones tienen que hacer una vuelta de varios kilómetros más porque hay caminos en tan mal estado que resultan un peligro de roturas o accidentes”, remarcó el colono.

También en la ciudad
Profundos zanjones en ambos lados de la calle, producto de la erosión causada por las precipitaciones y la falta de mantenimiento, complican a diario el tránsito sobre la calle Madre Selva en el barrio Cien Hectáreas de la capital del monte.
Se trata de una arteria muy transitada, con alto flujo del transporte urbano, lo que genera un riesgo latente para peatones y conductores debido a lo angosto de la calzada.
El tramo más complicado comprende dos cuadras, incluida la de la plaza Boca Juniors, donde los colectivos giran con lo justo para no caer a la cuneta que se formó, la que en algunos tramos supera el metro y medio de profundidad.
“Ya mandamos notas a la Municipalidad pidiendo el arreglo de la calle, pero hasta el momento no tuvimos ninguna respuesta y el problema es cada vez peor”, comentó el vecino Juan Pereyra.
A pocas cuadras, vecinos de Villa Stemberg reclamaron por el pésimo estado de un tramo de la calle Alemania, frente al predio de la Escuela Nº 781. Se trata de un problema de larga data que ya generó innumerables accidentes y problemas.
“Los vecinos ya ni pasamos por ahí con vehículos, pero cada tanto tenemos que socorrer a alguien que no conoce la zona y cae en el zanjón”, alertaron.

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