Mediante un trabajo conjunto entre la Comisaría de la Mujer, personal del área social de la Municipalidad y Salud Pública lograron asistir a una octogenaria que residía con un hijo en una vivienda a punto de colapsar en el barrio San Miguel. La mujer padece problemas mentales y desde hace años vivía en pésimas condiciones, rodeada de basura y sin higienizarse. Se mantenía recluida y sus vecinos no la veían salir de la casa.
Si bien años atrás fueron beneficiados con el Programa de Mejoramiento Barrial (Promeba), proyecto mediante el cual se construyó una habitación de material con baño instalado en cada terreno, la señora y su hijo utilizaban dicho cuarto como un depósito.
Debido al estado de abandono general, la salud de Juana Ramona F. (85) se hallaba en serio riesgo, por lo que en primera instancia fue derivada al Hospital Samic para atención médica de rigor.
Por su parte, la comuna se encargó de desarmar la estructura colapsada y de la construcción de una vivienda de emergencia. La intervención de la Comisaría de la Mujer se dio a partir de la denuncia de vecinos que alertaron sobre la situación de la anciana.
“El mal olor era permanente porque no tenían letrina y la señora hacía sus necesidades adentro de la casa. Ella es enferma mental y estaba piel y hueso. El hijo trabaja, pero también tiene problemas y no puede con la madre”, comentó una vecina.
Territoriodigital – Foto: Daniel Villamea