El presidente de la cooperativa, Roque Schwemberg, aseguró que de igual manera “va a ser difícil que se recupere sola, sin otros aportes importantes” • No obstante, lograron reducir el déficit que acarrea.
El titular de la Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (Celo), Roque Romeo Schwemberg, aseguró que ya “hemos logrado rebajar el déficit”, que ascendía a más de 160 millones de pesos cuando asumió la nueva gestión a inicios de este año, en medio de constantes reclamos de los usuarios y con una crisis institucional.
“Si las tarifas no están reguladas de modo tal que no podamos recuperar el costo que implica producir, la cooperativa no tiene ninguna posibilidad de salir a flote”, aseveró el titular de la Celo. Sin embargo, aclaró que una vez que se actualicen las tarifas, “lo mismo va a ser difícil que la cooperativa se recupere sola, sin otros aportes importantes, porque ya el balance del año pasado cerró con un déficit de 130 millones y cuando nosotros nos hicimos cargo ya era de cerca de 160 millones”.
“A través de una mayor prolijidad en la gestión, se ha logrado reducir los precios de compra de la mercadería, aunque todavía no tenemos un resultado firme en cuanto a cuáles serán los números de nuestra gestión, pero ya hay un anticipo de lo que estuvieron haciendo el síndico y el consultor externo que nos dan en este primer período que tenemos un déficit inferior al del año pasado, a pesar de que hubo aumento de sueldos y suba de precios de lo que debemos comprar. A pesar de que la inflación indicaría que el déficit debería ser mayor, apuntamos a que será menor”, afirmó Schwemberg, quien añadió: “Todavía no me dijeron cuáles son los valores que se redujeron, porque el síndico y el consultor externo están trabajando para cerrar el primer semestre”.
El dirigente confió en que “cuando cerremos nuestro balance este año será menos, aunque no sé bien de cuánto”. Y sobre las tarifas dijo que “el descongelamiento será de manera paulatina, ya que antes de que la Provincia se adhiriera a la Ley de Convergencia, se hablaba de un aumento del 30%, pero con el aumento de sueldos de empleados, ese porcentaje ya quedó en la nada”.
Servicios normalizados
Con respecto a los constantes reclamos de los usuarios, el presidente de la Celo analizó: “Estamos teniendo una temporada de tranquilidad, por el hecho de que en esta época la gente gasta menos agua, que era lo que mayor reclamo causó en el verano. A pesar de que sigue habiendo cortes de luz, está tranquilo”.
“Nosotros tenemos una línea que va a Aristóbulo del Valle -que no es problema de la Cooperativa, sino de Emsa- que tiene muchas interrupciones en el servicio y que cada vez que se debía hacer una reparación en esa línea debían cortar la luz de varios barrios de Oberá, Colonia Alvear y Alberdi”, explicó.
Esto provocaba una interrupción del suministro en lugares como Villa Schuster, Picada Vieja, San Miguel, Alvear y Alberdi, “pero logramos poner un seccionador en la salida de Oberá que permite cortar la energía eléctrica después de que se cortara esa línea, mientras que antes se tenía que cortar la luz en Tres Esquinas y había toda una sección sin electricidad”, detalló.
Sobre la recaudación de la Celo, “desagregando luz y agua, más o menos estamos recaudando unos 13 ó 14 millones de pesos. Por supuesto que esto no alcanza para los gastos de la cooperativa, porque solamente de personal tenemos un poco más de seis millones de pesos con aportes, además de planes de pago con la Afip, donde debemos juntar en estos momentos unos cuatro millones”.
Como si fuera poco, la nueva conducción de la Celo también debe hacer frente a “unas cuotas mensuales y el compromiso de ser agentes de retención de IVA. Toda esta plata que contamos como ingreso no es toda nuestra: también tenemos que cumplir con todos los impuestos provinciales, tasas, contribuciones al Eprac por el agua”, enumeró.
Schwemberg confirmó que tiene previsto viajar a Posadas para cerrar unas diferencias que tienen con Emsa por una deuda que la Celo mantiene con ésta última. “Sí, había una deuda con Emsa de un poco más de seis millones de pesos, más otra de similares montos que nosotros contamos como pagada porque es por factura de energía que hemos abonado pero con cheques diferidos. Nosotros la contamos como pago, pero para Emsa, hasta que no entre el efectivo a la caja, la tiene como deuda. Hay una pequeña diferencia y estamos haciendo un blanqueo de nuestra situación con ellos, pero lo vamos a aclarar porque los números son prácticamente iguales”.
(Primera Edición)