Hace dos años falleció su papá y, poco tiempo después, su mamá se mudó a Santa Fe con una nueva pareja. Ya con una pequeña hija, sin trabajo ni una familia que la contenga, una adolescente de 17 años pensó en abortar su segundo hijo en camino. Estaba desesperada, desbordada por tantos temores y pesares conocidos.
En ese contexto, una amiga le dijo que lo piense, que también podría dar en adopción a la criatura que lleva en su vientre. Y fue así que recurrió a las redes sociales, ese mundo paralelo donde los jóvenes se desenvuelven con tanta naturalidad en busca de afecto y respuestas que muchas veces no encuentran en casa.
Claro está, los riesgos pueden ser enormes, aunque en este caso la jovencita de Panambí encontró gente decente que le señaló una alternativa sana.
De esta manera surgió el contacto con referentes de la asociación Grávida, un servicio voluntario de ayuda que ofrece acompañamiento y orientación a las embarazadas en dificultad para evitar la opción del aborto.
“Cuando hicimos contacto con ella le dijimos que la vamos a acompañar y asistir en todo lo que necesite para su embarazo. Ella en un principio tenía la idea de abortar a su bebé porque se encuentra en una situación de mucha vulnerabilidad y se veía desbordada por la situación, más teniendo en cuenta que ya tiene una nena de ocho o nueve meses, por lo que un nuevo embarazo le significaba un problema en su vida”, explicó Valeria Quintana, abogada obereña e integrante de Grávida a este medio.
Tras la primera reunión la joven aceptó la ayuda y entendió que “hay otros caminos y que puede continuar con la vida del bebé”, agregó la asesora.
“Está angustiada”
El domingo, El Territorio informó que la adolescente -cuyo nombre se preserva por tratarse de una menor de edad- publicó en un grupo de WhatsApp su intención de dar en adopción al bebé por nacer, lo que generó innumerables opiniones y tuvo una amplia repercusión en medios nacionales.
“SI ALGUIEN SABE?? Kien desee de corazón adoptar a un bb recién nacido que se comunique a mi nm. GRACIAS”, compartió el sábado y el mensaje trascendió rápidamente.
Ayer, Quintana reconoció que “ahora ella está angustiada porque siente que metió la pata”, puesto que no esperaba tamaña amplificación social y mediática por un WhatsApp. Incluso, tuvo que salir del grupo debido a ciertos reproches.
Al respecto, la referente de Grávida aclaró que hasta el momento no la asesoró jurídicamente para tramitar una posible adopción, pero le explicó cuál es el proceso.
“En un momento me planteó la cuestión de la adopción, pero desde el voluntariado lo que hacemos es acompañar a las mamás porque muchas desisten de esta opción y deciden quedarse con el bebé. Hemos acompañado a otras mamás y gracias a Dios todas están felices con sus bebés y luchando para salir adelante”, subrayó.
De todas formas, a juzgar por los hechos, la madre continúa con la idea de dar en adopción al bebé y por ello lo hizo público. “Nos enteramos de la publicación que hizo en las redes sociales y nos sorprendió, pero creo que ella no dimensionó la repercusión que tendría”, agregó Quintana.
Ningún trámite
Actualmente la joven cursa el octavo mes de embarazo, reside con su novio y un hermano en la casa de la familia, en la zona rural de Panambí. Según comentó Quintana, desea terminar la secundaria y luego estudiar enfermería.
En tal sentido, comentó que “su situación es muy difícil, su papá murió, su mamá se fue a vivir a Santa Fe y el padre del bebé en camino la abandonó. Se le hace difícil afrontar todo sola y creo que por eso actuó como lo hizo”.
Sobre la posibilidad de concretar la adopción, hasta el momento no existe trámite alguno y todo se reduce a los deseos de la progenitora, que además pretende mantener el vínculo con su hijo.
“Siempre me manifestó que quería seguir teniendo contacto con el bebé, que desea que pueda conocer su origen. Es chica, por ahí es muy ingenua y pretendía que la gente que adopte a su bebé también la ayude económicamente, y ahí es donde se generó una confusión, como si estuviera negociando su hijo”, reconoció la asesora.
Respecto a la cuestión legal, desde la Unidad Regional II de Policía confirmaron que el domingo, tras la publicación de este matutino, una comisión de la Brigada de Investigaciones se dirigió a Panambí y entrevistó a la menor, quien confirmó sus intenciones.
De todas formas, al no configurarse ningún delito, la Justicia de Instrucción dispuso la intervención de la Defensoría de Familia para el seguimiento del caso.
Así, si lo desea, la menor podría presentarse ante la defensora y manifestar que quiere iniciar el trámite, donde tendrían prioridad los inscriptos en el registro único de adoptantes.
Al mismo tiempo, fuentes judiciales subrayaron la necesidad de la urgente intervención de la Dirección de Niñez Municipal, organismo que debe velar por la asistencia y contención de la madre vulnerable.
Por Daniel Villamea
interior@elterritorio.com.ar
Territoriodigital