Las elecciones legislativas nacionales de este domingo en Misiones confirmaron una marcada polarización entre La Libertad Avanza y el Frente Renovador Neo, que concentraron casi el 70% de los votos. En Oberá, el espacio libertario se impuso con comodidad, mientras que los partidos tradicionales, como el peronismo y el radicalismo, quedaron relegados a un segundo plano.

En toda la provincia, con el 100% de las mesas escrutadas, La Libertad Avanza obtuvo el 37,13% de los votos (224.433 sufragios), consagrando a Diego Hartfield y Maura Gruber como nuevos diputados nacionales. En segundo lugar se ubicó el Frente Renovador Neo, con el 30,05% (181.615 votos), lo que permitió a Oscar Herrera Ahuad quedarse con la tercera banca en disputa. De esta manera, ambas fuerzas sumaron en conjunto el 67,18% de los votos emitidos en Misiones.

El kirchnerismo, representado por Fuerza Patria, quedó en tercer lugar con el 9,4%, seguido por el Partido Agrario y Social (PAYS), que obtuvo el 8,38%. Más atrás se ubicaron el Partido Fe, con el 4,27%, y la Unión Cívica Radical, con el 3,78%.

En Oberá, donde votó el 65,6% de los 51.556 electores habilitados, la tendencia fue similar: La Libertad Avanza se impuso con el 45,96% (14.973 votos), seguida por el Frente Renovador Neo con el 25,98% (8.462), Fuerza Patria con el 8,17% (2.661) y el PAYS con el 6,42% (2.091).

De esta forma, Misiones volvió a experimentar una fuerte polarización política, esta vez entre un espacio de alcance nacional alineado con el presidente Javier Milei y otro de raíz provincialista, como la Renovación. Un escenario que reconfigura el mapa político misionero y desplaza a las históricas fuerzas tradicionales del centro del debate electoral.

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