Agenda cultural
Recuerdo que en algún momento del siglo pasado (siglo 20) se puso en tela de juicio por algunos autores el derecho al tiempo libre del trabajador, el derecho al “ocio”, al descanso, porque conllevaba la idea del “no hacer nada”, de la inactividad, y en economía representaba lo contrario a la ganancia y al progreso. No se pensaba en el ocio creador sino en el consumismo. Todo lo contrario al pensamiento actual, donde el tiempo libre permitió la creación del turismo como actividad económica de primera categoría. Este recuerdo de mis lecturas de juventud me permite comprender mejor el libro de la Master en Dirección y Consultoría Turística Alicia Krieger cuyo tema pone en primer lugar al “Turismo Rural y Eco Turismo en la Provincia de Misiones, Región del Alto Uruguay”. Este turismo justamente tiene en cuenta un tiempo de ocio, un tiempo de descanso, y la novedad ha sido la creación del turismo en territorio rural, con personas que lo fueron creando casi de casualidad, sin ningún estudio especial, sino como algo que surgió como servicio al prójimo que sufría algún inconveniente fuera de su hogar. Actualmente es una actividad que requiere capacitación universitaria, tal como se hace ahora, donde varias Universidades lo tienen entre su oferta de estudio. Y el presente libro es el resultado de un trabajo personal de la autora que lo circunscribe a la Región del Alto Uruguay, desde Oberá a los Saltos del Moconá pasando por El Soberbio donde existe un paso fronterizo importante que ha logrado un enorme desarrollo turístico gracias a la construcción de la Ruta costera Nº 2 “Juan Pablo Segundo”. Antes se llegaba al destino de los Saltos del Moconá (“el que todo lo traga”) por la Ruta 12 y luego por la Ruta 14 , lo que obstaculizaba el desarrollo de la zona., especialmente de las chacras existentes, , por las dificultades para comunicarse con los centros desarrollados de la Provincia. La culminación de la Ruta Costera 2, de 130 km sobre el río Uruguay permitió lo que la autora define en el capítulo 1: el Turismo rural y el eco turismo. Estudia varios ejemplos, y realiza entrevistas a dos emprendimientos que iniciaron el turismo rural en la Zona Centro, “El Jardín de la Nona” (de la familia Bárbaro) y la “Chacra Suiza (de la familia Weber). Fueron inmigrantes que convirtieron sus chacras y sus casas en un emprendimiento turístico, adaptando sus costumbres y conocimientos para servir a los visitantes ocasionales y realizar tareas educativas en las escuelas de la zona. Sobre la ruta 103 la familia Espinosa construyó un camping quinchos, y todo el equipamiento necesario, que se lo llevó el río Uruguay en una de sus bravas inundaciones Y en el capítulo 2 la autora describe su visita a tres emprendimientos ejemplares sobre la ruta Costera 2, la chacra suiza, la Reserva Yasí Yateré y el Complejo Las Malvinas. También se refiere a Capioví como la localidad pionera en los proyectos de Agroturismo.