Si bien se dice que las elecciones del próximo mes de octubre son presidenciales, es imprescindible saber que también se eligen senadores y diputados nacionales, que serán los que representen a los misioneros en ambas cámaras. Es un voto que se debe tener muy en cuenta, porque muchas de las decisiones y leyes salen del parlamento nacional convertidas en ley, y que pueden o no beneficiar a las provincias; como es el caso de Misiones, que logró incluir en el presupuesto nacional varias obras públicas de gran envergadura, las cuales no se pueden realizar con recursos provinciales y mucho menos con recursos municipales, sino nacionales. Como ser la construcción de la conexión eléctrica entre San Isidro – Oberá que solucionaría el problema de luz cada vez que tiene inconvenientes la línea eléctrica que conecta Roca con Oberá y toda la zona centro; como ser también la implementación de una zona aduanera especial, que sigue pendiente de resolución e implementación.
Dada la paridad electoral ninguna de las fuerzas políticas nacionales tendrá la mayoría en ambas cámaras, y es ahí en donde tienen peso los legisladores de los partidos provinciales, que tendrán o no la fuerza de poder negociar políticamente, y de acuerdo a la cantidad de legisladores que tenga, mayor peso tendrán y viceversa en beneficio para los misioneros. Esto probablemente no podría ocurrir cuando los legisladores nacionales responden a fuerzas políticas nacionales, porque en la mayoría de los casos terminan votando por mandatos partidarios y en contra de los intereses de las provincias. Que por poner un solo ejemplo, el senador de Juntos por el Cambio de la provincia de Misiones, Humberto Schiavoni, adhirió con su firma que los organismos que regulan determinadas actividades productivas sean disueltas, como es el caso del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) que le costó sudor y lágrimas conseguir a los productores, que estaban a merced del sector de la industria yerbatera, y que puede llegar ser eliminada, según quienes sean electos senadores y diputados nacionales, muchos de los cuales representan intereses de sectores económicos poderosos y que financian las campañas a determinados sectores políticos y candidatos a cambio de conseguir algún beneficio legislativo o gubernamental.
Obviamente que cada cual puede votar al candidato a presidente que quiera, y a los candidatos a senadores y diputados nacionales que crea que le pueden representar sus intereses o ideologías. Por ello es necesario estar atentos a las propuestas e intereses de cada uno de los candidatos sobre las propuestas a favor de los misioneros; y que luego deberán irá a defenderlas y no solamente ser un numero más en la legislatura, obedeciendo mandatos de las mayorías que conforman los frentes electorales nacionales, que siempre terminan favoreciendo a las provincias más grandes y con mayor caudal electoral.
Debido al alto porcentaje de votos en blanco en la PASO, en la categoría a senadores y diputados nacionales, se debería de tener en cuenta la importancia de votar a los candidatos al congreso nacional y que estos que vayan a defender los intereses de los misioneros y no a los que solamente obedecen a mandatos partidarios nacionales y que no atienden las demandas y necesidades de las provincias pequeñas como Misiones.
Que explote todo de una vez ¿Decidir en caliente es lo mejor?
Es verdaderamente notable como los que votaron al libertario Javier Milei en las PASO y lo volverían a hacer en las elecciones generales de octubre desconocen las propuestas del libertario y lo único que responden es a que explote todo de una vez. Una posible respuesta que seguramente tiene su origen es en lo de dinamitar el Banco Central, con lo que tuvo la aprobación de los sectores electorales que le votaron en las PASO, demostrando de esta manera la bronca y frustración con la que carga una porción importante de la población. Claro está que los problemas económicos que tiene el país no se resuelven con que explote todo y gritar «viva la libertad carajo»
Es notable el discurso del candidato libertario Javier Milei, quien durante la campaña de las PASO, y mucho tiempo antes, decía lo que ahora dice que no dijo que realizaría en caso de llegar a la presidencia, y argumenta que se entendieron de mala manera sus promesas y dichos pre electorales. Está claro que bajó el tono de su discurso duro, al que hizo entrar a la candidata a la presidencia de juntos Por el Cambio Patricia Bullrich, llevándola al terreno discursivo en donde la candidata estuvo haciendo agua por todos lados al hablar de los diferentes temas de economía; por lo que tuvo que recurrir, para cubrir ese notable bache en su discurso, al economista Carlos Melconián quien fuera presidente del Banco Central de Mauricio Macri.
Por el lado del candidato por Unión por la Patria y actual ministro de economía Sergio Massa, permanentemente está realizando nuevos anuncios de carácter económico para contención y en beneficios dirigidos a los sectores medios y a los trabajadores, anunciando medidas económicas que son a favor de los trabajadores, jubilados y también dirigidas al sector de los monotributistas y a favor de las PYMES.
Algunos sociólogos y politólogos observan que la discusión política se corrió hacia la derecha, y todos los días se está discutiendo si es posible o no lo que propone el candidato libertario como candidato a presidente. Es decir que logra imponer su agenda, no solamente de los candidatos presidenciales, sino que también a dirigentes, economicistas, panelistas y periodistas.
Lo extraño es que los que tienen decidido volver a votar a Milei desconocen totalmente lo que propone el candidato, y mucho menos le importa lo que prometió y promete como candidato. Ahora dice que mantendrá los planes sociales, que se eliminarán diferentes ministerios, como el de Educación y el de Salud, y ahora dice que se darán vouchers a los alumnos y para la atención médica en los hospitales públicos. Mas allá propone la venta de órganos, argumentando que cada quien es dueño de su cuerpo y puede hacer lo que quiere, sin embargo está en contra de la interrupción voluntaria del embarazo; lo que motivó a que varias comunidades religiosas lo acompañaran votándolo. Y ahora se enfrenta al Papa Francisco calificándolo como un «jesuita que promueve el comunismo», «personaje impresentable y nefasto» y «representante del maligno en la Tierra». Estas descalificaciones al líder religioso no son inocentes, sino que apuntan a recibir el apoyo de aquellos sectores que están en contra de las comunidades católicas por muchas razones, y que obliga a que diferentes sectores sigan debatiendo y discutiendo sobre sus dichos, afirmaciones e insultos.
Milei es el reflejo de un sector de la sociedad que siempre es pesimista, cargan con muchos odios y rencores, pero también con descontentos y frustraciones de malas gestiones y de promesas incumplidas de varios gobiernos. Siempre se dice que los dirigentes políticos no son otra cosa que el reflejo de la sociedad, ya que los políticos no nacen de un repollo. Y como hemos visto en los últimos tiempos, las candidaturas se construyen en torno a la construcción de un candidato al que se promociona como líder o mesías, y con la idea de que podrá sacarnos de las malas situaciones económicas y sociales como si fuera Súperman, que en la vida real no existe, y es de ficción como muchos de los candidatos presidenciales que hubieron y hay hoy en día; y que en verdad son solamente candidatos formados por el marketing publicitario a través de diferentes técnicas de manipulación.