Será la fórmula del Frente Renovador que con mucha anticipación se dio a conocer, mientras que la oposición aún no tiene definido quienes serán sus candidatos para las elecciones del 7 de mayo del próximo año. Desde esta columna habíamos anticipado un tiempo atrás que las elecciones en Misiones se realizarían en la primera quincena de mayo, una fecha muy lejana de las elecciones nacionales, además habíamos anticipado desde varias semanas atrás que la fórmula del oficialismo sería encabezada por los diputados provinciales Hugo Passalacqua y por Lucas Romero Spinelli.
También se definió que el actual vice gobernador Carlos Arce será el que encabezará la lista de candidatos a senador nacional y el actual gobernador Oscar Herrera Ahuad será el jefe de campaña, con lo que queda abierto un gran interrogante: que lugar ocupará el actual mandatario provincial. Teniendo en cuenta que no se dio a conocer quien encabezará la lista de diputados provinciales, cuando se esperaba que la encabece el actual gobernador. Tampoco se dijo quién encabezará la lista de candidatos a diputados nacionales, las que se realizarán conjuntamente con la elección presidencial en octubre del próximo. Restaría saber si el Frente Renovador acompañará alguna candidatura a presidente o irá nuevamente con la boleta corta, es decir, solamente con las candidaturas a diputados y senadores nacionales, estrategia que no le dio muy buenos resultados al oficialismo provincial.
Algunos especulan que Herrera Ahuad podría encabezar la lista de candidatos a diputado nacional, dándole mayor peso, teniendo en cuenta la alta imagen positiva que al día de hoy tiene el mandatario provincial sumado a la candidatura del actual vice gobernador Carlos Arce, quien será el que encabezará la lista de candidatos al senado nacional.
Como dato, la renovación pone en juego dos bancas en el senado y la oposición una sola banca y en el caso de diputados nacionales pone en juego una banca, el Frente de Todos dos bancas, y Juntos por el Cambio una banca. Y el efecto arrastre de las candidaturas presidenciales fueron determinantes en todas las provincias y seguramente lo vuelvan a ser en las elecciones nacionales del próximo año.
El conductor político del Frente Renovador, Carlos Rovira, señaló en su momento que la sociedad se quedaba con ganas de tenerlo un poco más de la Gestión de Passalacqua quien tiene un importante carrera política desde la militancia, iniciándose como vice decano de la Facultad de Artes; paso a ser Ministro de Educación de la provincia, período en el cual se dio la mayor recomposición salarial al sector docente. Luego fue diputado provincial y luego electo como vice gobernador y en el 2015 electo gobernador, siendo actualmente diputado provincial y vicepresidente primero de la legislatura provincial. En tanto que Lucas Romero Spinelli, es un joven legislador provincial de 30 años de edad y muy vinculado al desarrollo de las nuevas herramientas tecnológicas y los nuevos conocimientos, y tiene mucha llegada al sector del voto joven.
En Juntos por el Cambio están sondeando al diputado nacional Martín Arjol y Pedro Puerta, hijo del ex gobernador de Misiones en la década del 90 y a la formula Ariel «Pepe» Pianesi con Martín Göerling. Aparentemente esto se definiría elecciones internas abiertas entre el 12 y el 18 de marzo. Mientras otras fuentes señalan que Pedro Puerta en verdad quiere encabezar como candidato la lista de senadores o diputados nacionales y esto también lo disputarán con los hermanos Schiavoni, que quieren ir por la reelección.
Mientras que en el Frente de Todos a nivel provincial no se sabe mucho más allá que tanto Héctor «Cacho» Bárbaro y Cristina Brítez tienen la intención de ir por la reelección como diputados nacionales.
El Mundial de los que miran como bobos
La reacción de Lionel Messi muy conocida e incluso comercializada en remeras, tasas, etiquetas de vinos, canciones y en otras cuestiones más, su desahogo fue discutida, analizada y hasta calificada de vulgar por algunos medios nacionales; y lo que en realidad demuestra el poder y la importancia que tiene y la forma en que impacta en la sociedad lo que diga el capitán de la selección nacional Argentina. ¿Qué pasaría si el mejor jugador del mundo diera alguna definición política, tanto del oficialismo como de la oposición? Y es a eso que seguramente algunos sectores políticos le temen.
La gente salió a festejar todos los partidos ganados por la selección Argentina y en particular cuando se consagró como campeona del mundo, llegando a convocar en la llegada de la selección al país a unas cinco millones de personas que fueron con la intención de festejar con los jugadores, festejo que se tuvo que suspender por el desborde de la gente en el paso de la caravana, porque no podían avanzar, cuestión que generó críticas en particular por la mala organización y por otro lado la utilización política que se dio incluso en el transcurso del mundial, en donde algunos entendían que si se consagraba campeón la selección beneficiaría al actual gobierno nacional y si perdía perjudicaría al gobierno, porque sería otra frustración de los argentinos en un mes muy particular, en donde siempre existen tentaciones y sentimientos encontrados.
También entró en debate el decreto del día de feriado nacional y se polemizó sobre si la selección debía o no debía ir a la casa rosada a saludar al presidente Alberto Fernández, entendiendo que el hecho que los jugadores, no todos, decidieron no ir fue tomada por la oposición como una cachetada al gobierno nacional; cuando es bien sabido que el presidente representa a todo el pueblo Argentino le guste a quien le guste.
Durante el mundial y en los festejos se intentó dividir a los argentinos, criticando los festejos anticipados y en particular el de la multitudinaria concentración en donde algunos medios destacaron la cantidad de heridos y detenidos que no llegaron a superar el centenar, cuando se calcula que hubieron unas cinco millones de personas, evidenciándose que se le quiso dar mayor importancia a los 14 detenidos y a unos 30 heridos que la convocatoria en sí que por su magnitud fue ejemplar, salvo un minúsculo grupo de inadaptados de los que siempre hay. Incluso desde un medio opositor al gobierno reiteraban que la limpieza de las calles la va a tener que pagar el ciudadano porteño, cuando en realidad todos los días se limpia la ciudad capital y esa actividad está incluida en las tasas que le cobra el gobierno de la ciudad de Buenos Aires a los porteños.
En definitiva, más allá que se diga que no se debe mezclar el fútbol con la política, esto en verdad nunca se cumple; y cada cual busca sacar agua para su molino y el pueblo no es bobo.