El locutor está acusado de violar a una nena de 8 años. Se aguarda la declaración de doce testigos en dos jornadas. En noviembre último, el debate se pospuso por fallas técnicas en el audio de la Cámara Gesell.
Tras la postergación de noviembre por problemas técnicos en la grabación de la Cámara Gesell, el miércoles comenzará el juicio oral contra el locutor Alejandro “Cacho” Santa Andrea (60), acusado de violar a una nena de 8 años en su domicilio de esta localidad.
Para evitar nuevos inconvenientes, en diciembre el Tribunal Penal Uno solicitó la intervención de técnicos del Poder Judicial para optimizar la calidad del audio de lo que se considera una prueba clave en el expediente.
El último viernes, las partes analizaron la copia mejorada de la Cámara Gesell. Fuentes del caso comentaron que la criatura brindó detalles del interior de la vivienda donde se habría cometido el abuso, mencionó características físicas del acusado y contó cómo la habría violado.
La causa está caratulada como “abuso sexual con acceso carnal en concurso real y abuso sexual simple en concurso real”, delito que implica una pena máxima de quince años de prisión y un mínimo de seis.
Actualmente, la nena que denunció al locutor tiene 11 años y reside con su madre y hermanos en un barrio cercano a la casa del acusado.
En diálogo con El Territorio, la progenitora comentó sus sensaciones en la previa al debate oral y confirmó que fue citada a declarar como testigo, al igual que otras dos de sus hijas.
“Espero que ahora sí empiece el juicio, porque ya pasó mucho tiempo y nos tienen de acá para allá. Ya quiero terminar con todo esto porque es mucho lo que sufrió mi hija. Ese tipo le hizo mucho daño. Ella después tuvo muchos problemas en la escuela y en el barrio, porque le decían cosas y se burlaban”, comentó Rosa Q.
Para el debate fueron citados doce testigos y se fijaron dos días consecutivos de audiencia. En tanto, por tratarse de un delito de instancia privada, el juicio se realizará a puertas cerradas y sólo será pública la etapa de lectura de alegados y sentencia, prevista para el jueves.
Al no haber testigos presenciales de la presunta violación, la declaración de la pequeña en Cámara Gesell constituye la principal prueba en contra de Santa Andrea, quien al momento de la denuncia se desempeñaba como secretario del Concejo Deliberante obereño y era reconocido como el histórico maestro de ceremonias de la Fiesta Nacional del Inmigrante.
La denuncia
Según el expediente de la causa, el 19 de agosto del 2013 la presunta víctima salió con su hermana -entonces de 13 años- con la intención de ofrecerse para limpiar el patio de la casa de una mujer que vive cerca de la Facultad de Artes, como lo hizo alguna vez a cambio de ropa. Esos días hacía mucho frío y no tenía abrigo.
“En un momento dado se separan, acuerdan encontrarse más tarde en otro lugar y la niña se aleja para buscar un trabajito para ella en alguna casa. Pasado el mediodía, la niña habría llegado al domicilio de Pascual Alejandro Santa Andrea, ubicado en calle Viamonte 354 de esta ciudad. Este se encontraba al frente de su vivienda y habría hecho pasar a la niña al interior. Allí le sacó la ropa y la hizo bañar con shampoo y, quitándose sus prendas, procedió a manosear los genitales de la menor, le puso un dedo, luego de secarla le habría llevado a la cama donde le hizo succionar su órgano sexual haciendo lo propio con ella. Que después de todo ello le entregó la suma de aproximadamente 18 pesos y le amenazó que si contaba algo de lo que pasó a su familia iba a mandar a unos hombres para que la encuentren y él la iba a matar”, indica el escrito donde la jueza subrogante oportunamente dictó el procesamiento.
Recursos y demoras
El 27 de agosto, El Territorio publicó la existencia de una denuncia por abuso sexual contra Santa Andrea. Esa misma mañana el locutor fue detenido.
Tras el primer testimonio de la presunta víctima en Cámara Gesell, fue procesado y permaneció detenido 115 días en la Seccional Tercera.
El 20 de diciembre del mismo año recuperó la libertad por un fallo de la Cámara de Apelaciones, órgano que cuestionó ciertos aspectos de la instrucción realizada por la jueza subrogante, Alba Kunzmann de Gauchat. Asimismo, el mismo órgano recomendó la realización de una segunda Cámara Gesell.
Los psicólogos que entrevistaron a la pequeña en sucesivas ocasiones indicaron que tiene un “discurso espontáneo y creíble, no fabula, no está dirigido a perjudicar a terceros, es verosímil y, si bien la menor puede ser manipulada dada su edad, no presenta signos de que lo haya sido”.
En mayo pasado, la Cámara de Apelaciones en lo Penal de Posadas rechazó el último planteo de la defensa y ratificó lo actuado por la Justicia de instrucción.
Los camaristas José López y Jacobo Mass opinaron que no existían argumentos para rechazar la elevación a juicio, avalando el pedido que oportunamente realizó la fiscal.
La resolución del tribunal de alzada se basó en el informe remitido por el perito que entrevistó a la criatura en la segunda Cámara Gesell. En su declaración, la presunta víctima ratificó la acusación contra el imputado.
Ahora, el tribunal encargado de juzgar a Santa Andrea estará encabezado por la jueza Lilia Avendaño, secundada por José Pablo Rivero y Jorge Erasmo Villalba, ya que Francisco Aguirre decidió inhibirse.
15
Años de prisión.
Es lo máximo que podría recibir el locutor obereño, de ser hallado culpable del delito de “abuso sexual con acceso carnal en concurso real y abuso sexual simple en concurso real”. La pena mínima es de seis años.
Territoriodigital