En el “Día del Respeto a la Diversidad Cultural”, nombre que en Argentina se le dio al 12 de octubre a partir del 2010, el Festival Internacional de Cortometrajes Oberá en Cortos presentó en su programación una muestra de Cine Indígena con obras de comunidades de Brasil y Argentina.
Con la presencia de integrantes de cada cortometraje, fueron exhibidos “Coloñero Kuery”, realizado por la Comunidad de Ka’aguy Poty del Valle de Cuña Pirú (Aristóbulo del Valle, Misiones); “El tiempo del nvÿo” realizado por la Comunidad Qom del Paraje Maipú (Chaco), “Entrevista: costumbres y prácticas ancestrales de la mujer del Pueblo Wichí”, dirigido por Josefa Ballena de la Comunidad Wichí (El Sauzalito, en el Impenetrable Chaqueño); “Preparación del Mbyte”, corto realizado en conjunto por la productora audiovisual Terracota y la Comunidad Ysyry (Colonia Delicia, Misiones); y “Um tempo para mim”, de la directora brasileña Paola Mallmann junto a la Comunidad Koenjú (Santo Angelo, Brasil).
“¿Por qué no hacer nosotros mismos nuestras historias, desde nuestro interior? Mostrar lo que realmente somos nosotros en la comunidad Wichí”, contó Marita Navarrete luego de la exhibición del corto que presenta diálogos con mujeres de la comunidad que comparten las costumbres y prácticas ancestrales de su pueblo. “No fue fácil, pero tampoco difícil, y eso estamos encarando ahora, son cortos que seguramente vamos a ampliarlos más”, comentó.
Estas palabras ponen de manifiesto un proceso que ya desde hace varios años toma cada vez más fuerza y en el cual jóvenes y adultos de pueblos originarios se capacitan para desarrollar nuevos lenguajes dentro del cine, recuperar la memoria de sus prácticas ancestrales y reafirmar su identidad.
Arnaldo Lencinas, del Pueblo Qom, compartió cómo fue la realización de “El tiempo del nvÿo”, un cortometraje que surge en el marco de una capacitación sobre producción audiovisual y manejo de cámara, y en el cual el sonido de las chicharras impregnaba todo el lugar. “Entonces como que surgió ese trabajo con los chicos, llamaba la atención porque los chicos a la mañana ya se ponían a armar su forma de cómo cazar las chicharras, cómo elegir las chicharras, buscarlas para entretenerse, y surgió de hacer este trabajo juntamente con mis sobrinos, primos, y también el que le puso la voz es mi papá, quien más o menos relata los momentos de la chicharra, el tiempo”.
Acerca de este trabajo audiovisual de la Comunidad Qom del Paraje Maipú, el cineasta paraguayo Hugo Giménez -que se encontraba en la sala- felicitó a Arnaldo y destacó el trabajo de los chicos que cuentan de forma sencilla y poética su vínculo con las cigarras. “Ahí hay un tiempo cinematográfico y de relato que es hermosísimo” afirmó y valoró que la obra pueda estar presente en la pantalla del Oberá en Cortos, festival que desde hace 20 años sostiene el lema “Por la identidad y diversidad cultural”.
En el caso del corto “Coloñero Kuery”, el cine se convierte en una herramienta que evoca la memoria y sirve para narrar cómo fueron los procesos organizativos de la comunidad de Ka’aguy Poty a través de la entrevista que le realiza Tatiana Chamorro a su abuela Santa Chamorro. Al compartir los recuerdos de su infancia y reflexiones, ofrece una mirada desde la Nación Mbya Guaraní sobre las políticas del gobierno de Misiones en cuanto a la colonización de sus tierras ancestrales en el Valle del Cuña Pirú.
Junto a Tatiana también se encontraban Dalma Chamorro y Bernardo Benítez quienes contaron que la idea surgió a raíz del 100 aniversario de la Colonización de Aristóbulo del Valle. Cuando desde el público les preguntaron por qué eligieron el cine para contar esta historia, Bernardo explicó que “las películas son un proyecto y también una herramienta muy importante para proyectar, para expresarnos”. De igual modo compartió su deseo y el de muchos otros jóvenes de la comunidad en seguir aprendiendo, de poder acceder a libros, y recuperar saberes que les fueron arrebatados. “En realidad yo tengo muy poco conocimiento todavía sobre la sociedad actual, pero igual sigo luchando, sigo enfrentando mis miedos. Es muy difícil estar acá frente al público, hablar, pero igual me esfuerzo”, admitió.
La proyección del Ciclo de Cine Indígena del Festival Oberá en Cortos cerró con “Um tempo para mim”, cortometraje ganador del Certamen Audiovisual Entre Fronteras impulsado por el Instituto de Artes Audiovisuales de Misiones (IAAviM) y el Instituto Estadual de Rio Grande do Sul (IECINE – RS, Brasil). Al finalizar, Luz Duarte del Colectivo Ara Payu, quien se desempeñó como asistente de dirección, compartió su experiencia de realización y la importancia de mantener sus tradiciones y prácticas culturales a partir de ficcionar desde la perspectiva mbya guarani el proceso de cómo viven las jóvenes mujeres su primera menstruación. “Antes por ahí se hablaba mucho más de eso, o sea, todas las chicas sabían que iba a llegar ese momento y ya sabían que tenían que tener un tiempo para ella misma y saber que crece y que cambia. Es una etapa muy sensible de la chica, y creo que no todas las culturas lo ven así; entonces, a mí me pareció muy interesante presentarlo desde esa perspectiva, desde nuestra cosmovisión”, concluyó.
El Ciclo de Cine Indígena se proyectó durante el Festival en el marco de la Muestra de Cine Comunitario, propuesta articulada desde el área de Producción Comunitaria del IAAviM que lleva adelante Verónica Fulquet.
Oberá en Cortos se desarrolla hasta el sábado 14 de octubre, en la ciudad de Oberá, Misiones. La 20º edición del Festival es organizada por el IAAviM, el Gobierno de Oberá, la UNaM, la Facultad de Arte y Diseño de Oberá (FAyD-UNaM) y Productora de la Tierra. Cuenta además con el apoyo del CFI, INCAA, el Ministerio de Cultura de Misiones y el Colectivo Cultural Los Aromos.