Su capacidad de aprendizaje es sorprendente pesar de su condición; estudia programación en el Punto Digital del Laboratorio de Innovación Tecnológica del Silicon Misiones en Oberá.
“Nosotros nos dimos cuenta que tenía autismo cuando Alex iba al jardín, vimos que no se adaptaba y no hacía la tarea, su carpeta estaba en blanco, sin embargo terminó el jardín sabiendo leer, contar hasta 100 y escribir, no sé cómo aprendió” manifestó su mamá Clara Elisabeth Olsson.
“A mí me pasaron el link del Silicon, porque quería mandarle al Laboratorio Silicon Misiones con sede en Oberá, entonces cuando le anoté y el empezó hacer los cursos fue todo muy acelerado, el hacía un módulo, luego ya estaba preguntando si salió el otro, incluso llegó a personalizar el tono del profesor en el celular; con Silicon el encontró un lugar donde interactúa con el profesor, así que hoy Alex es feliz gracias a Silicon” concluyó Clara.
Por su parte José Luís Camacho, coordinador de Silicon Oberá expresó que “Alex es nuestro estudiante estrella, al principio notamos que tenía una capacidad muy superior a la media, entonces tuvimos que replantear los módulos para ir más rápido por su capacidad de aprendizaje, que incluso nos llegó a superar y marcar algunos errores, entonces el tutor nos encargó esta responsabilidad para ver alguna forma de atender esta demanda, el coeficiente de Alex es muy elevevado, con él trabaja la familia y un grupo de psicólogos y psiquiatras. Básicamente nosotros le damos un curso de programación, la idea es que los que cursen tengan la posibilidad de ser programadores”, agregó Camacho.