Cuentan que el hombre es de bajo perfil y no busca publicad, pero sus vecinos decidieron dar conocer la obra de quien consideran “un héroe anónimo”, ya que ante la falta de agua potable en el barrio Esperanza, decidió instalar una canilla pública para asistir a las familias de la zona.
El vecino solidario reside sobre calle Bélgica y dispone de un pozo perforado, por lo que no sufre la escasez del vital líquido que apremia al barrio ante las limitaciones del servicio que presta la Cooperativa Eléctrica Limitada de Oberá (Celo).
“No hay palabras para agradecerle a este señor, es un héroe anónimo. Es tan buen tipo, hizo una canilla pública para saciar en algo necesidades de los vecinos. Gracias a él salimos del paso”, comentó un vecino agradecido.
En tanto, mencionó que estuvieron ocho días sin agua de la Celo, al tiempo que anticipó que los habitantes del lugar pretender organizar algún tipo de reclamo en conjunto.
“La situación es desesperante. Si yo tuviese plata para un abogado le haría un juicio porque así es imposible vivir. Todos tenemos chicos y es un sufrimiento eterno. Para colmo, fui a la Celo y me dijeron que no tienen ningún reclamó, siendo que yo llamé varias veces, al igual que otros vecinos”, remarcó.