Con la certeza de que las 3,5 toneladas de marihuana incautadas entre bolsas de yerba mate en la localidad entrerriana Sauce de Luna fueron acopiadas y posteriormente cargadas en la zona Centro, uniformados federales cordobeses persisten en la búsqueda de al menos dos sospechosos misioneros que fueron sindicados como el presunto proveedor y el nexo entre éste y la banda de narcotraficantes.
Uno sería obereño e incluso habría aportado el lugar donde se acopió la droga previo a ser cargado en el camión, y el otro, al parecer, es oriundo de la zona Norte de Misiones. Los pesquisas federales los tienen identificados mediante seudónimos a instancias de las intervenciones telefónicas durante al menos cuatro meses, por lo que “el trabajo de campo sigue”, reconoció una fuente de estricta reserva vinculada a los operativos del martes.
La intención de los federales es llegar cuanto antes a los eslabones de la cadena que quedaron sueltos, después de detener a seis integrantes de la misma organización. Entre ellos está el chofer del camión, domiciliado en la ciudad entrerriana de Villaguay, y cinco vendedores oriundos de Bell Ville (Córdoba), que era el destino del estupefaciente previa redistribución a los centros de venta de esa provincia donde se comercializaba al menudeo por medio de una aceitada red de dealers.
“Lo que se atacó es una cadena de distribución con eslabones que operan como células en gran parte de Córdoba” refirió el magistrado a cargo de la causa, Sergio Pinto, excusándose de brindar más detalles sobre la investigación en Misiones porque “hay una línea ascendente que sigue hasta Oberá, donde se proveyó, acopió y cargó la droga. Esos pasos los estamos dando actualmente”.
En se contexto, un inmueble sobre la calle Catamarca de esta ciudad fue alcanzado por la docena de allanamientos paralelos realizados el martes a la madrugada, pero el resultado no fue el esperado. Igualmente, saltaron otros datos que obligaron a los uniformados a permanecer en la provincia durante un tiempo más para determinar posibles complicidad entre otras personas.
Para favorecer el avance de la investigación sin que se filtren datos sensibles, el magistrado decretó el secreto de sumario durante diez días.
Cuatro meses
De acuerdo a la información a la que accedió El Territorio, la investigación federal que derivó en la millonaria incautación comenzó el 16 de mayo, día en que fue desbaratado un punto de venta de drogas que utilizaba como pantalla una carnicería, en pleno centro de Bell Ville.
Para llegar a todos los involucrados fueron intervenidos varios teléfonos, y así llegaron a saber que se preparaba el traslado de una gran cantidad de marihuana desde Misiones. El lunes 4 de septiembre el camión partió hacia su punto de carga, que terminó siendo Oberá. Lo hizo seguido por efectivos federales que esperaron el momento exacto para dar el golpe.
El sumario policial que está en manos del juez Pinto refiere que el camión estuvo una semana en esta ciudad. Inclusive, se supo que en ese intervalo se produjo una discusión por el pago de la droga y las escuchas dieron cuenta de un gran desacuerdo, al punto de que uno de los misioneros que están siendo buscados le dijo al chofer que se llevara el camión sin nada, pero al final la compra se concretó.
Desde esta ciudad el Iveco salió cargado. En un momento entró a una playa donde se quedó varias horas porque uno de los autos campanas había detectado un control policial, pero finalmente el tránsito siguió tal cual lo previsto hasta que el lunes por la mañana, en Sauce de Luna, sobre la ruta 127, fue detenido y tal cual lo previsto, entre bolsas de yerba mate vieja incautaron los panes de marihuana.
A los detenidos se les secuestraron un Volkswagen Golf y tres motos de mediana cilindrada, además de dos armas largas, teléfonos celulares y dinero en efectivo. Dos automóviles con sus ocupantes son buscados ya que hacían de campana y ni bien se asomó la federal, aceleraron a fondo hasta perderse.
Territoriodigital