Incluso, muchos niños que asisten a la Escuela 288 evitan pasar por la calle Monte Caseros y utilizan un paso alternativo por el arroyo que cruza el barrio, aunque el precario puente no cuenta con los mínimos requisitos de seguridad.
“Hace mucho que venimos reclamando por un vecino que deja el portón abierto y tiene tres perros rottweiler que atacan a las personas. Él dice que es por seguridad, pero la calle es pública y nadie puede pasar. Ya hicimos las denuncias, pero como tiene plata, nadie hace nada”, lamentó Barboza.
Contó que los feroces perros ya habrían lesionado a varias personas, lo que genera mucho temor en el barrio. Para colmo, las autoridades municipales estarían al tanto de la situación, pero hasta el momento no tomaron medidas. “Parece que esperan que pase algo grave para actuar. Esos perros son muy peligrosos y estamos con mucho miedo, por eso nadie pasa a pie por el lugar. Tampoco nos dieron bolilla con el puente que pedimos para cruzar el arroyo, porque así como está es una trampa mortal”, graficó.
A pesar de las dificultades, la comisión vecinal organiza actividades a favor de la comunidad. En ese sentido, Barboza anticipó que el próximo sábado realizarán una fiesta por el día del niño en el merendero de calle Guillermo Ruff.