Alentamos a participar con generosidad en la colecta y a colaborar mediante “la oración ferviente que fortalece y sostiene, y la ayuda económica que podamos hacer, dentro de nuestras posibilidades para sostener a la vez dicho trabajo apostólico”.
Con este motivo en las misas que se celebrarán en las parroquias del país los días 1 y 2 de julio, además de rezar por el Papa, se realizará la colecta para que el Sumo Pontífice utilice los medios que le llegan de parte de los hermanos para ayudar a otros hermanos más necesitados.
La colecta tiene la finalidad de contribuir al fondo de la ayuda que ofrece el Santo Padre en ocasiones de catástrofes, hambrunas y otras circunstancias provocadas por desastres naturales.
«Que la colecta abra los corazones y nos permita tender una mano a tantos pobres, enfermos, marginados. Ayudemos a que el Santo Padre pueda vivir el ser obispo y cristiano con la solidaridad de los fieles»