El hecho que tiene ribetes tragicómicos sorprendió a la Policía y a los familiares del presunto ladrón.
Sabido es que algunas relaciones entre yerno y suegra no son del todo amistosas, pero esta supera al imaginario colectivo.
Lo cierto es que el delincuente sabía lo que hacía, esperó el momento y actuó.
Los investigadores precisaron que destruyó la puerta principal de la despensa y una vez adentro, fue en busca del efectivo.
Escapó confiado de que todo había salido como lo planificó. Sin embargo, los testigos lo complicaron y apuntaron contra el yerno. Horas más tarde, la misma concubina del sospechoso “lo mandó al frente” al descubrir lo que había ocurrido.
El caso trascendió el domingo cerca de las 17.30 cuando la damnificada denunció que delincuentes ingresaron a su despensa, ubicada sobre calle Álvar Núñez Cabeza de Vaca al 88.
De inmediato se inició un operativo encabezado por efectivos de la Seccional Primera y Personal de la Brigada de Investigaciones, dependientes de la Unidad Regional II de Oberá.
Al arribar al local constataron que el ladrón no sólo se llevó el dinero en efectivo sino que además, huyó con una notebook.
Las pesquisas avanzaron en la investigación y con la colaboración de los vecinos se constató que el principal sospechoso era el yerno, quien tendría antecedentes delictivos.
Con esos datos, fueron hasta su propiedad donde los atendió la concubina. La mujer, al enterarse de lo ocurrido, entregó la computadora y una suma que rondaría los 14 mil pesos.
Trascendió que los elementos estaban escondidos entre los objetos personales del sospechoso.