El viernes se presentaron los datos de la autoevaluación universitaria ante representantes de la Coneau.
Tal cual lo establece el artículo 44 de la Ley de Educación Superior (24.521), la Universidad Nacional de Misiones (Unam) presentó ante la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (Coneau) los datos resultantes de su autoevaluación que dieron cuenta de varias problemáticas que se destacaron como comunes a todo el ámbito universitario del país: la alta deserción de los estudiantes tras el primer año y el poco porcentaje de graduación.
El titular de la Coneau, Néstor Pan, arribó a Misiones para llevarse en mano los números finales tras la autoevaluación, aunque el documento – de carácter público – no está confeccionado en su totalidad.
El rector de la Universidad, Javier Gortari, indicó que la semana próxima el mismo será compartido con los consejeros superiores y, tras ello, la sociedad toda podrá conocer el estado en que se encuentra la institución. La última vez que la Unam se autoevaluó fue hace doce años, pese a que la Ley establece un período de seis entre cada proceso evaluativo.
Los datos
Gortari señaló que “los datos más relevantes que aparecen son la opción de la matrícula hacia carreras que no son las más demandadas, como ingeniería, cuyo ingreso ha crecido pero han crecido mucho más las económicas y sociales”. Indicó entonces que “todo el esfuerzo que se ha hecho en becas, promociones de las carreras de ingeniería, química, informática, no se ve en la matrícula. No se obtuvo el resultado esperado”.
Consideró que “las carreras de ingeniería se siguen viendo como ‘duras’ y difíciles. Además, el sistema argentino está sujeto a la voluntad del estudiante que es el decide qué es lo que quiere estudiar. Pan, de la Coneau, planteaba que en algún momento el sistema universitario argentino va a tener que decir qué necesita el mercado”.
En ese sentido, el titular de la Coneau dio algunos números. “Mientras el 13% de nuestra matriculación nacional está en la carrera de derecho, solamente el 2% de la demanda laboral reclama abogados. Mientras el 7% está en ingeniería, el 19% de la demanda laboral es de ingenieros. Tenemos un retraso de alrededor del 60% anual en producción de ingenieros, lo que quiere decir que estamos produciendo sólo el 30% de lo que el mercado reclama”.
La otra cuestión relevante que resultó de la autoevaluación es “el masivo ingreso y la masiva deserción y ese es un problema de todo el sistema. Nosotros, en números groseros, tenemos un ingreso anual del orden de los 6.000 estudiantes, lo que quiere decir que en diez años ingresaron 60 mil jóvenes a la universidad. De ellos, se deben haber graduado en los últimos diez años, alrededor de 7 u 8 mil. Tenemos a 20 mil estudiando y 20 mil que se fueron”. Agregó que, entonces, “si mirás los números crudos, el sistema es ineficiente porque tenés toda una infraestructura y un desarrollo de servicio” para pocos egresos.
Entonces, señaló como el “desafío en Misiones, lograr que cada vez más chicos del secundario puedan entrar a la universidad y una vez que entren el desafío es contenerlos y que terminen, pero eso va a ser lento”.
Dentro de los aspectos positivos, Gortari remarcó que desde el 2003, año de la última autoevaluación, el presupuesto para las universidades “mejoró muchísimo”, lo que “se tradujo en salarios de docentes y no docentes”.
Indicó que “el presupuesto por alumno creció como también la cantidad de docentes con posgrado, lo que se supone una mejora en la calidad de la enseñanza. Mejoraron las dedicaciones, lo que significa que tenemos docentes más dedicados a la universidad a pleno, también eso se supone que es mejora en la calidad y se amplió la cantidad de docentes investigadores”.
Cómo sigue el proceso
Tras la autoevaluación y la entrega del documento final a la Coneau en Buenos Aires, “el año que viene vendrán evaluadores externos”, indicó Gortari y destacó que es “gente formada y preparada que vendrá a cada facultad a hacer la evaluación externa sobre el documento base que construimos. Harán entrevistas con estudiantes, docentes y no docentes. Ese será el informe externo de la universidad y sobre eso se hace un plan de trabajo para mejorar las fallas, que están en plan de mejora permanente”.
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