La bolsa de plástico es el producto estrella de nuestra cultura de usar y tirar, nos duran 10 minutos y tardan 150 años en ser asimiladas por la tierra. Las usamos todos los días y no nos damos cuenta que se malgastan grandes cantidades de materiales y energía para fabricar un producto de un solo uso, siendo una amenaza al medio ambiente cuando son desechadas ya que pueden ser ingeridas por animales terrestres y acuáticos, además de dejar toxinas en el medio ambiente a medida que se descomponen.
Tanto su fabricación y distribución como su tratamiento posterior provocan importantes problemas ambientales. Es por esto que la Dirección de Saneamiento Ambiental a través de su área de Concientización lanzó una campaña de comunicación con el objetivo de reducir el uso de bolsas plásticas fomentando el uso de bolsones, bolsas ecológicas y carritos a la hora de realizar las compras.