La causa se tramita en el Juzgado de Instrucción Uno, a cargo de la jueza Alba Kunzmann de Gauchat, y está caratulada como supuesta corrupción de menores y supuesta violación de los deberes de funcionario público.
En marzo del 2014, personal de la Secretaría de Apoyo para Investigaciones Complejas (Saic) allanó las instalaciones del hotel, tras lo cual analizaron cientos de horas de filmaciones de las cámaras de seguridad del lugar y elevaron un informe a la Justicia.
Con las pruebas halladas, las autoridades judiciales entendieron que existen elementos suficientes para avanzar con el expediente judicial. Las grabaciones de las cámaras y el testimonio de varios empleados resultaron clave para confirmar la presencia de las chicas menores de edad en el lugar.
El Territorio accedió en exclusiva a una secuencia de imágenes en las que se observa a un chino ingresando al hotel con tres menores, con las que luego tomó el ascensor.
En tanto, hasta el momento, sólo los dos comisarios implicados prestaron declaración indagatoria y se desligaron de las supuestas orgías. En cambio, reconocieron que, entre la noche del 18 de febrero y la madrugada del 19, participaron de la celebración del cumpleaños de un ciudadano chino que se realizó en la terraza del hotel, pero no se registraron como huéspedes.
Fuentes del caso precisaron que son seis los imputados. Se trata de dos sujetos de nacionalidad china, un amigo argentino, el gerente del hotel y los dos oficiales superiores de la Policía de Misiones.
Llamativamente, a pesar de lo contundente del testimonio de varios testigos que corroboraron la relación de las menores con los chinos, como también la permisividad que habría exhibido el gerente, el expediente permanece encajonado y se encamina a la prescripción.
Las “xxhouse”
Entre los testimonios recepcionados en la instrucción judicial, se encuentra la versión de conserjes del hotel del casino, quienes confirmaron la presencia de las jovencitas y habilitaron la imputación de supuesta corrupción de menores contra los seis sujetos.
En tanto, por su condición de policías, a ambos comisarios les anexaron la carátula de supuesta violación de los deberes de funcionario público.
Al mismo tiempo, si bien las filmaciones ubican a los oficiales en los pasillos del hotel y en la terraza, los conserjes sindicaron a los chinos como acompañantes habituales de las jovencitas.
“Nunca hubo restricción para el ingreso de menores, lo único que se controlaba era que no ingresen solos. Cuando ingresaron una vez al hotel, yo no tenía registro de las chicas, el gerente me llama y me dice que les asigne una habitación, hasta me decía la habitación. Sube el chino y demás, vuelven a bajar y después suben con las chicas a la habitación, y cuando llamo al gerente para saber qué hacer con el caso especial de esta gente, me dijo ‘ponele como NN’”, detalló un empleado en el expediente de la causa.
Consultado sobre la edad de las chicas, precisó que “se notaba que algunas eran menores de edad”, al tiempo que explicó: “Solamente a los chinos se los registraba en el sistema y que yo tenga conocimiento no existe base de datos con información de las acompañantes”.
A juzgar por los testigos, la trama de complicidades avanzaba hasta la administración del hotel, al punto que la gerencia habría creado una sigla para registrar a las menores de edad sin despertar sospechas.
“A mí, el gerente general del hotel me decía que las registre como “xxhouse use”, generalmente éste solicitaba que no molestemos con solicitudes de registro a los chinos. Los chinos simplemente se acercaban hablando con el gerente y él solicitaba las tarjetas para ingreso a las habitaciones”, precisaron.
Sobre las “xxhouse”, explicaron que “es un invento a solicitud del señor Florentín (gerente del hotel), debido a que no nos permitía molestar ni solicitar registro alguno de las acompañantes de los chinos. Se creó una ficha con ese nombre como si fuera una persona que alguna vez se registró en el hotel”.
“Son huéspedes de los cuales no tenemos registros, pero que iban con frecuencia. Estos registros no eran necesariamente de menores, sino de personas a quienes nos indicaban que no sean molestados por una atención de preferencia. Esto venía por órdenes telefónicas del propio gerente”, aportó otro conserje que en su momento fue citado a declarar.
La conexión china
Tras una exhaustiva investigación, el personal de la Saic logró identificar a las menores que se hallaban en compañía de varios mayores en instalaciones del hotel del casino. El trabajo de los pesquisas dio por tierra con versiones que indicaban que se habían borrado todas las grabaciones del sistema de seguridad por cámaras.
El caso se dio a conocer por este diario a principios de marzo del 2014. Luego se supo que los propios empleados del lugar venían alertando sobre actitudes muy cuestionables por parte de algunos chinos que se hospedaban en el lugar.
“Venían una vez por semana y jugaban fuerte, mucha plata, por eso tenían una atención preferencial de la gerencia”, reconocieron, al tiempo que “más de una vez se los vio con chicas que uno, por la pinta, supone que eran menores. Andaban de a tres por los pasillos, bajaban, entraban al casino y tomaban champán. Lo peor es cuando había que limpiar las habitaciones. Hacían un desastre”.
El descontrol era tal que, luego de las fiestas en los cuartos de los chinos, estos no se podían utilizar por varios días debido a la mugre y el olor a cigarrillo. “Después de limpiar todas esas habitaciones, había que dejar las ventanas abiertas y el aire prendido gran parte del día por el tufo que había”, agregaron.