Erika Viviana Bohn, reina de la colectividad alemana, fue elegida para representar a sus raíces en una nueva edición de la Fiesta Nacional del Inmigrante que se realiza cada año en el Parque de las Naciones de la localidad de Oberá.
El relato de la reina alemana comenzó con nervios y tal vez un poco con vergüenza pero al hablar de su familia le fue imposible relatar con gran orgullo lo que es para ella representarlos en un evento de tal magnitud, “participar para mi es algo muy emotivo. Es importante enseñar a las nuevas generaciones sobre las distintas culturas que existen”.
“Yo desde muy chica me veo sumergida en lo que es la cultura alemana, fui a un colegio alemán y también traté siempre de perfeccionarme en el idioma. Tuve también la oportunidad de viajar a Alemania y encontrarme con una cultura totalmente distinta”, agregó.
Además, Erika contó cuáles fueron las diferencias más importantes que encontró en el país alemán, “allá son muy estrictos en su forma de ser. Es admirable su educación y lo formados que son, la verdad me gustó mucho ver de cerca algo que tanto me inculcó mi familia”.
La representante alemana tiene 20 años y 1,70 de estatura, cursa la carrera de licenciatura en Marketing, vive en la ciudad de Posadas y comentó, “siempre estuve presente en la fiesta en la parte de los desfiles, ahora que me toca representar a la colectividad la verdad que me siento muy feliz. El orgullo es poder seguir con el legado y mi mensaje para la juventud es que traten de formar parte de una colectividad y no renegar de nuestras propias raíces”.
“Pienso que no todos se sienten orgullosos de sus raíces y eso se tendría que valorar aún más para no desviar en cosas negativas, aclaro que esto es mi punto de vista y no generalizo para nada”, enfatizó, Erika Viviana Bohn.
“Si bien me costó muchísimo desprenderme un poco de lo que es mi vida en la capital provincial ya que tuve que dejar de estar con mis amigos, participar para mi es algo maravilloso, el grupo que formamos con mis compañeras es único. Llegamos a formar amistades entre nosotras, la envidia no existe para nada. Cuando esto termine me voy a llevar los mejores recuerdos y eso es lo que más me importa”, resaltó.
Para finalizar su relato, la soberana alemana, no dejó pasar la oportunidad para dedicar unas palabras a su familia y amigos, “mi familia y amigos siempre están presentes, acompañándome y ayudándome en todo lo que necesito. Es más, mis amigos ya están preparándose para venir a verme y alentarme cuando llegue la gran noche en que nos subamos al escenario”.
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