Mientras, el Foro de Seguridad vende pollos para arreglar los vehículos policiales y los vecinos sostienen que los menores están afectados por la droga, que consiguen a 200 metros de la Municipalidad.
En los últimos ocho años, varios vecinos fueron asaltados y torturados en Guaraní. De esta cuestión nuevamente se habla luego del robo a la familia de José Feldick (58).
Los vecinos están preocupados por la difícil situación que vive el pueblo ante la proliferación del delito y la falta de herramientas para prevenirlo y combatirlo.
“No hay nada en concreto, ningún preso, ningún caso esclarecido”, manifestó un poblador a El Territorio.
Ante esta situación, desde el Concejo Deliberante llamaron a una reunión con el intendente, el jefe de la Policía, integrantes del Foro de Seguridad, comerciantes y vecinos. El encuentro está previsto para hoy a las 10 en el salón del deliberativo local.
Mientras, ayer quedaron una vez más en evidencia las necesidades de la fuerza pública, dado que el Foro tuvo que organizar una venta de pollos asados a fin de reunir dinero con el cual colaborar en la reparación de los patrulleros.
“No hay móvil, tampoco combustible y faltan más policías, parecemos una colonia en el olvido”, manifestó el vecino Adrián en relación a esta actividad de emergencia.
Guaraní parece una comunidad tranquila durante el día, pero la realidad es que los pobladores están con miedo, principalmente cuando cae la noche.
“Si te asaltan frente a la Municipalidad, ¿qué nos queda a los que vivimos más lejos? Durante el día venden marihuana a 200 metros de la Municipalidad”, denunciaron públicamente algunos vecinos.
Uno de los últimos asaltos fue a la familia Okomuñuk, a la que le sustrajeron 80 mil pesos. Los apellidos siguen con las familias Kononczuk, Shegg y Feldick -a esta última le robaron dos veces y ninguno de los casos fue esclarecido-, entre otros.