El ambientalista Rulo Bregagnolo remarcó que los embalses generan espejos de agua e incrementan la humedad en el ambiente, favoreciendo las condiciones para la reproducción de los vectores de esta y otras enfermedades.

El ambientalista Rulo Bregagnolo, uno de los referentes de la Mesa Provincial por el No a las Represas, vinculó el brote de Dengue que se desató este verano en Misiones, con la construcción de represas en zonas tropicales y subtropicales. Bregagnolo explicó que las represas incrementan los espejos de agua y alteran el clima y el ciclo de lluvias, por lo que se humidifica el ambiente, generándose más reservorios para los mosquitos vectores, no sólo del Dengue (el Aedes Aegypti), sino de otras enfermedades asociadas a las represas.
En diálogo con MisionesCuatro.com, Bregagnolo sostuvo que “al principio me costó mucho encontrar esa relación (entre el Dengue y las represas), porque el Aedes aegypti es un mosquito urbano. Pero (la proliferación de vectores) sí tiene relación con las represas porque al haber un gran espejo de agua, cambia el ecosistema y el clima. Al aumentar la humedad relativa en la zona, aumenta la proliferación de vectores de enfermedades”, indicó Bregagnolo, enfatizando que la propagación de vectores, no se circunscribe únicamente al Dengue y los mosquitos Aedes.
En consonancia con lo planteado por funcionarios estatales de la provincia, este ambientalista resaltó que la falta de “solidaridad” y responsabilidad de los ciudadanos, también inciden en el problema de los altos índices larvarios que se están registrando en la provincia, en estos momentos. “El Estado debe ser riguroso y exigir (la eliminación de los reservorios) y los vecinos deben tener la actitud solidaria de ocuparse de lo que ocurre en su casa”, remarcó.

“Es una cadena de actores que empieza por lo que hace cada uno en su casa y que debe continuar con un Estado que debe dar respuestas”, añadió.

Por otra parte, Bregagnolo calificó de “irresponsables” a los defensores de las represas en Misiones, pues a su entender, no se están haciendo cargo del impacto negativo de los embalses, como por ejemplo, en la proliferación de vectores de enfermedades. “Lo que se ha hecho en el tratamiento costero en lo que es hoy el lago de Yacyretá, es de una gran irresponsabilidad. En el Yabebirí, en San Ignacio, todavía hay gran cantidad de algas, que no van a generar (mosquitos Aedes), pero sí otros mosquitos (vectores de) enfermedades”, planteó el ambientalista.
En esta línea, Bregagnolo advirtió que las represas traerán varios problemas sanitarios en Misiones y con otras enfermedades como la Leishmaniasis, vinculada a mosquitos del género Lutzomyia, que vivían en los montes, pero con la deforestación, se fueron trasladando a zonas periurbanas, poniendo en riesgo a perros –el reservorio predilecto- y a humanos. “Lo que afecte a los arroyos, ríos y selva, está relacionado con la calidad de vida de la gente”, aseguró, apuntando a la represa de Yacyretá como responsable de daños a la salud de los misioneros.

Fuente:

Misiones Cuatro

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