La propuesta empezó como un micro emprendimiento de Isabel Núñez de Olivera, vecina del lugar, y luego se convirtió en un desafío vecinal como tarea que realizan a pulmón en beneficio de los niños más carenciados del lugar.
“Al comienzo la idea fue mía, pero no sabía por dónde empezar, entonces empecé a difundir lo que tenía pensado hacer a través de las redes sociales, desde entonces muchísima gente se puso en contacto conmigo para ayudar. La actividad estará destinada a todo el barrio, más que nada para los chicos, porque el intendente anterior nunca organizó nada… entonces la idea era organizar algo distinto, para que se sientan bien y puedan pasar una navidad distinta”, comentó Isabel.
La actividad que empezó como un emprendimiento de Isabel, luego se convirtió en un desafío vecinal como tarea que realizan a pulmón en beneficio de los niños más carenciados del lugar. Hasta el momento cuentan con la colaboración de distintos locales comerciales de la ciudad quienes donarán alimentos y golosinas el día 20 de diciembre. Algunos de los comercios involucrados son Doña Laura y La Casa de las Golosinas, a quienes agradecen profundamente.
“Actualmente nos reunimos todos los sábados con un grupo de trece chicos de la Facultad de Artes y de una pizzería para hacer distintas actividades, como venta de pollos, empanadas y así poder recaudar fondos y después poder comprar las cosas para ese día, porque esto lo hacemos a pulmón”.
Si logran cumplir con las expectativas, el próximo año pretenden realizar festivales similares para el Día del Niño entre otras fechas celebres.