Un matrimonio obereño fue condenado ayer a la pena de catorce años de prisión, al ser hallado culpable de los delitos de robo calificado y abuso sexual en perjuicio de dos menores de edad, cometido en enero del año pasado.
La sentencia condenatoria fue impartida ayer al mediodía por el Tribunal Penal Uno de esta localidad, presidido por la magistrada Lilia Avendaño e integrado además por los jueces Francisco Aguirre y Pablo Rivero.
Fuentes consultadas por El Territorio consignaron que el encartado Héctor Ramón Romero (38), dedicado a la venta ambulante, fue condenado como autor de los delitos de “robo calificado por el uso de arma blanca y arma de utilería (dos hechos)”, “abuso sexual calificado”, “abuso sexual con acceso carnal calificado” y “privación ilegítima de la libertad reiterada (dos hechos)”, todos ellos en concurso real.
Su esposa. identificada como Mariela Cristina Bielas (26), recibió la misma pena que Romero, aunque con la distinción de que ella fue considerada autora del delito de “robo calificado por el uso de arma blanca (dos hechos)” y partícipe primaria de “abuso sexual calificado”, “abuso sexual con acceso carnal calificado” y “privación ilegítima de la libertad reiterada”.
De esta manera, los dos sujetos que están detenidos desde el mismo día del hecho -24 de enero de 2014- deberán continuar tras las rejas en distintas celdas de Oberá por al menos una década.
Se inculparon mutuamente
El debate oral comenzó ayer a la mañana y se desarrolló a puertas cerras debido a las características del caso.
Consistió en una sola jornada, en la que se tuvo en cuenta la denuncia radicada y los relatos de las víctimas vertidos en Cámara Gesell, donde según las mismas fuentes, fueron más que contundentes.
En el juicio estaba prevista la declaración de un testigo, que era el padre de las víctimas, pero éste falleció hace poco más de seis meses a causa de un accidente de tránsito.
Durante el debate, los dos imputados tomaron la palabra y dieron su versión de los hechos ante los magistrados del Tribunal. En este contexto, los voceros consultados indicaron que los dos encartados se acusaron mutuamente y que Romero, por su parte, negó todo los cargos que se le endilgaban.
Sin embargo, para los jueces del Tribunal la declaración de las víctimas, que al momento del hecho tenían 17 y 15 años, fueron claras y contundentes, por lo que no dudaron en aplicar un fallo condenatorio para los imputados.
El caso
El hecho que derivó en juicio oral y terminó condenando al matrimonio ocurrió el 24 de enero del año pasado, cerca de la medianoche.
Según se desprende de la investigación del caso, todo ocurrió en la precaria vivienda del matrimonio ubicada en el barrio Sapucay de Oberá.
Esa noche, la mujer habría convocado a los dos menores hasta su vivienda por medio de mensajes de texto, con el argumento de ofrecerles mantener relaciones sexuales.
De acuerdo a lo detallado por fuentes del caso al momento del hecho, los dos menores eran conocidos del matrimonio, ya que todos residían en la misma zona de la ciudad.
Tras la invitación, los adolescentes acudieron al inmueble de la mujer y cuando apenas ingresaron fueron sorprendidos por Romero.
El hombre empuñaba un cuchillo con el cual intimidó y amenazó de muerte a los adolescentes. Luego, ante la mirada cómplice de su esposa, Romero obligó a los menores a que le practiquen sexo oral y luego les quitó sus dos teléfonos celulares y el poco dinero que llevaban consigo.
Posteriormente, las víctimas fueron liberadas de la vivienda y sin dudar acudieron a la Policía, donde narraron los vejámenes sufridos.
Ante la denuncia, efectivos del Comando Radioeléctrico de la Unidad Regional II acudieron de inmediato a la vivienda ubicada sobre la calle Sapucay del barrio homónimo. La pareja fue detenida y tras las rejas aguardaron la realización del debate oral.
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Celulares y dinero. Según se desprende de la investigación, a punta de cuchillo Romero se apoderó de los teléfonos celulares de las víctimas y del poco dinero que llevaban consigo al momento del hecho.