Los ruidos y molestias que generan la circulación de moto vehículos con caños de escapes adulterados son importantes, siendo una de las principales denuncias por parte de los vecinos de la ciudad para que intervengan en estas situaciones.
En la oportunidad, por primera vez, se realizó la destrucción de escapes de motos que fueron secuestradas en diferentes procedimientos por parte del área de inspección general de tránsito y los propietarios de las mismas pagaron las multas, retiraron el ciclomotor y colocaron un escape bajo las normas y condiciones.
El juez de Faltas de Oberá, Francisco Zá, explicó que “en este último tiempo quintuplicamos el monto de la multa que ronda los 5.500 pesos, no con intenciones de recaudar, sino porque las consecuencias son graves y generan mucha molestia en la comunidad, el vecino”.
Por su parte, el secretario Coordinador Daniel Behler, señaló que “en el corralón hay más de 200 motos en condiciones irregulares pero no podemos tocarlas porque los dueños no pagaron la multa y hacerlo sería una infracción de nuestra parte. Además estimamos que no las buscarán porque el costo de la multa es mayor al de sacar una moto nueva. De todas maneras trabajamos para erradicar estas motos que ocasionan molestia de las calles”.