Tras las PASO

Recordamos aquellas segundas décadas del Siglo XX  en las que nos hacíamos tiempo para repetir aforismos y frases que podían ayudar a momentos de nuestra vida cotidiana (de allí aquel «Todo es según el color del cristal con que se mira»).

   Entonces los «oráculos» que nos señalaban el bien y el mal. Lo malo o lo bueno, los encontrábamos en la familia y lo que iba un poco más allá y de lo que nos convenía ilustrarnos, se encontraba en las páginas de los diarios y revistas, señores feudales que cumplían para nosotros esa exclusiva misión.

   Cierto que no vamos a pecar de ingenuos y bien sabíamos cuando los utilizábamos -sobre todo en tiempo electoral- cuál era su perfil político.

   No olvidamos que entonces también coexistían las radios porteñas como L.R.3, Radio Belgrano, las radio más popular de entonces, pero éstas eran especialmente musicales y deportivas que cautivaban al oyente con la transmisión del «football» dominguero y en tren de recuerdos aparecen aquellos radioteatros, filón romántico-lacrimógeno del ayer, hoy reemplazado por telenovelas donde en muchos casos el romanticismo lacrimógeno dio paso a reflejar la violencia familiar.

       Durante los campeonatos mundiales de fútbol, la copa sudamericana y otros eventos de este deporte en el que compite con nosotros es otro país, el argentino se viste de patria y nuestra su profunda raíz nacional -y vaya paradoja- esto no sucede como regla infalible cuando un equipo argentino -un River, un Boca-  juega por una copa con un equipo extranjero, entonces el fanatismo de los colores partidarios hace que hasta se desee el triunfo de este último.

   Algo parecido puede suceder en los hombres políticos en tiempos electorales y más exactamente en el lapso final del tiempo electoral, cuando la candidatura está a un paso de coronarse o de sucumbir y en ese tiempo que bien podríamos llamarlo futbolísticamente «de descuento» ya olvidamos comportamientos éticos, ya consideramos al adversario ocasional como un enemigo y en esa desesperación actuamos frenéticamente, acudiendo a los golpes bajos o a la difamación personal

   Obnubilados olvidamos le juego bonito trasgrediendo reglas de comportamiento en la creencia de que hacerlo nos llevará más fácil al sitial soñado y esto puede suceder aún cuando en el campo adversario se tomen decisiones esperadas de tiempo, aun cuando se logren éxitos, si ideológicamente nos ubicamos en la vereda de enfrente, atacaremos -sin tiempo de medición- sistemáticamente lo realizado. Esto podría aceptarse como una expresión de disenso, pero va mucho más allá ya que no se trataría de disentir sobre puntos doctrinarios que no coinciden con nuestro programa político que en eso se y sí para la democracia

    Y bien pasaron las PASO que cumplen el rol de elecciones internas.

   En el caso de la presidencia dejaron  en carrera a Daniel Scioli  (FpV), Mauricio Macri (Cambiemos) y Sergio Massa (UNA)  en ese orden de acuerdo al caudal de votos obtenidos, en un  día en el que no se produjeron inconvenientes mayores.

   En Misiones la Renovación con el Frente para la Victoria obtuvo un contundente triunfo a favor de Daniel Scioli en las presidenciales.

    Y tras las PASO en que, valga la redundancia, se ha dado el primer paso, ahora el 25 de octubre todos los que han quedado habilitados para hacerlo se presentarán el para dirimir finalmente esta contienda electoral.

    Vale la pena destacar la corrección del acto electoral misionero lo que viene siendo una constante.

      Y mientras escuchamos la caída de las frutas de palta sobre el techo de zinc y meditamos sobre donde seguir acumulándolas, si repartirlas, si enfriarlas reflexionamos sobre las alternativas con que nos despierta la vida, de pronto mucho, de repente nada.

   Eso habrán sentido algunos postulantes a cargos electivos en las PASO del domingo 8 si no alcanzaron la cifra determinada. En cuanto a los que si la alcanzaron y sumaron, mayor será su inquietud, inquietud que solamente y para esa instancia, no habrán tenido si fueron triunfadores en la contienda electoral.

   Este bajón anímico será aún mayor si las encuestas (que imaginamos con diagnóstico reservado) lo ubicaron al tope. Escapándonos de lo puntual y en hablando de encuestas nuestro histórico mundo interior recuerda algo que solían hacer los guerreros de lustre de ayer mundial, cuando temerosos de su suerte militar recurrían a los oráculos griegos donde las pitonisas, tras la entrega de tabletas de oro  y plata- les impartían su suerte y lo hacían con palabras sibilinas las que estimulando el ego anunciaban el triunfo que pudo o no darse.

    Finalizadas que fueron las PASO el mundo político nacional entró en efervescencia y a través de los medios se está asistiendo a un verdadero duelo mediático que se ha titulado Scioli-Macri, irreverente por cierto que la definición presidencial de octubre se la envuelva en pasajes que pretenden pintar a los candidatos a la alta magistratura nacional inmersos en un culebrón como esos que proliferan en la pantalla grande y que, parido en la ciudad del Plata se extiende al país todo.

   Lo lamentable es que existan mentes afiebradas (¿o bien remuneradas?) que planifiquen tales operativos y que los ataques se centren (tanto en prensa como en TV) en cuestiones personales y se produzcan en lugar de debates sobre lo planificado en función de gobierno por los candidatos.

    Esta posición de enfrentamiento personal, fogoneada por la prensa nacional oral y escrita, no sienta bien ni a la política ni al país. Por ello agradecemos la transparencia que todo así lo hace predecir que continuará de la política misionera y  que se extenderá a los comicios del 25 de octubre próximo.

    La democracia sigue en pie, es una picardía querer desviarla del camino que con  tanto esfuerzo viene recorriendo en nuestro país.

   De una vez por todas, el argentino debe vestirse de patria y priorizar todo aquello que la consolide.

   El 21 de agosto de 1856 e puso en venta por primera vez y apareció el Primer Sello Postal Argentino «con destino al interior de la provincia», en la Administración de Correos de Corrientes y en casa de don Zacarías Sánchez. El sello de la primera emisión, que lleva el valor de Un Real M. C., en el cartucho inferior, era de color negro, impreso sobre papel barrilete delgado azul. Una información aparecida en el diario El Comercio, de dicho día, comentaba: «Los sellitos tienen detrás una preparación que, al humedecerla, se pega con facilidad a la carta franqueada». Y agregaba: «Aplaudimos esta innovación que hará honor a la provincia que la inicia (Corrientes), y que tan útil será al comercio todo, pues cada uno podrá de su casa franquear carta, sin tener que concurrir a la Administración». Esta maravillosa innovación se debía al ilustrado gobernador de la provincia de Corrientes, doctor Juan Pujol.

   En Inglaterra el 21 de agosto de 1897, fue botada al agua la fragata-escuela Presidente Sarmiento. Fue madrina de esta histórica ceremonia doña Ana C. de Domínguez, señora del entonces ministro argentino en Inglaterra, don Luis C. Domínguez. En el año 1898 el buque llegó al país. El comando había sido confiado por el ministro de marina, don Martín Rivadavia, el capitán de fragata Onofre Betbeder, con el teniente de navío Enrique Thorne de segundo. Sus oficiales de cubierta eran: Leopoldo Gard, Mariano Beascochea, Julián Irízar, Vicente Oliden, Ernesto Anabia, Guillermo Mulvany y Enrique Moreno. La Sarmiento, como se la llama cariñosamente, ha navegado sin interrupción por todos los mares que bañan el mundo, casi un millón de millas. Recibió, con los honores debidos, al Zar de todas las Rusias Nicolás II y a la Zarina, al Kaiser Guillermo de Alemania, al rey de España don Alfonso XIII, al rey de Portugal Carlos, a los presidentes americanos Taft, de los Estados Unidos de Norte América, y Alessandri de Chile, y otros personajes.