Esta joven mide 1,74 metros de altura y sus medidas son, 90-65-100, y está a punto de recibirse de abogada; y con respecto a la tradicional celebración de Oberá hace hincapié en que: “Se acuerden de que acá no hay competencia, que ninguna colectividad es mejor que la otra, que cada uno de nosotros está recordando nuestros antepasados, y que tiene que tratar de eso, que sigan las tradiciones y que cada uno debe llevar en lo más alto su cultura”
La ascendencia de Florencia proviene de su bisabuelo paterno, y reconoce que quiere “aprender a cocinar, porque realmente me encanta la comida portuguesa”.
La joven invita a todos los jóvenes y a la sociedad misionera en general a sumarse a este gran evento. «Porque Oberá es un crisol de razas, y cada uno debe tener una ascendencia de algún país que está representado en el Parque de las Naciones”, indicó.
La soberana portuguesa maneja los idiomas inglés y portugués, y tiene muy en claro que el futuro de la fiesta está en mano de los más jóvenes.
“Que la fiesta continúe depende de los jóvenes, y aparte es una forma de estar en una actividad, algo sano, algo lindo, en conocer gente, que aprovechen que tenemos esta hermosa fiesta en nuestra ciudad», dijo entusiasmada.
Florencia Vallejos Rosa
colectividad portuguesa
(Territoriodigital)