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Acuarela del Puerto (II)

La patria quiere nacer y sacarse cuanto antes la máscara de Fernando VII. Todo indicaba que las condiciones para que se alzase “a la faz de la tierra una nueva y gloriosa nación” no estaban dadas, ni mucho menos, sin embargo los guiños de la historia hacen posible el nacimiento .¿Independientes?.
Esta segunda entrega, tal como lo prometimos si así nos lo pedían, contiene algunos párrafos seleccionados de los acontecimientos o hechos que “marcan” la vida del Puerto de Buenos Aires entre 1806 al fin de siglo en nuestro trabajo inédito en ejecución señalado como “1 ARG.1” que continúa a lo editado el 10 de enero pasado.

La Independencia
(1806/ 1816)
El Parto Nacional
1810 «..EN LA MUY NOBLE Y MUY LEAL CIUDAD DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD PUERTO DE SANTA MARÍA DE BUENOS AYRES, 25 de Mayo de 1810: Los señores del Excmo. Cabildo, Justicia y Regimiento, a saber D….., se enteraron de una representación que han hecho a este Excmo. Cabildo un considerable número de vecinos, los comandantes y varios oficiales de los Cuerpos voluntarios de esta Capital, por sí y a nombre del Pueblo, en que indicando haber llegado a entender que la voluntad de éste resiste la Junta y Vocales que este Excmo Ayuntamiento sequencia de las facultades que se le confirieron en el Cabildo abierto del 22 del corriente; y por qué puede habiendo reasumido la autoridad  y facultades que confió y mediante la renuncia que ha hecho, el Sr. presidente nombrado y demás Vocales, revocar y dar por de ningún valor la Junta erigida y anunciada en el Bando de ayer 24 del corriente la revoca y anula, y quiere que este Excmo. Cabildo proceda a hacer nueva elección de los Vocales que hayan de constituir la Junta de Gobierno, y han de ser los Señores D. Cornelio de Saavedra, Presidente de dicha Junta y Comandante general de Armas, el Dr. D. Juan José Castelli, el Dr. D. Manuel Belgrano; D. Miguel Azcuénaga, Dr. D. Manuel Alverti, D. Domingo Mateu y D. Juan  Larrea, y Secretarios de ella los Doctores D. Juan José Paso, y Don Mariano Moreno….(Bando emitido por el Cabildo, Justicia y Regimiento Reproducción facsimilar)
1871. La Caricatura Política
En la portada de El Mosquito -periódico satírico fundado en 1862 por Meyer- aparecen Domingo Faustino Sarmiento, entonces presidente de la República, y Dalmacio Velez Sársfield. El presidente se disponía a viajar a Córdoba para inaugurar la Exposición Internacional que se realizaría allí y se le auguraba un recibimiento poco cordial.
-¡Quedémonos, Excelencia! Dicen los diarios que los cordobeses van a recibirnos con una silbatina y que nos hemos hecho muy impopulares.
– ¡Qué importa eso! ¿Acaso somos más populares aquí?
Hágame el favor de decirme a qué rincón de la república debemos ir para encontrar la popularidad.   (La Caricatura Política Argentina. Eudeba)

1880. La Gran Aldea
«El Buenos Aires de Fray Mocho era ya un Buenos Aires de vara alta. La monótona y lisa edificación de la colonia pronto iba a despertar; la «Gran Aldea» se preparaba para la historia grande. De Europa venían legiones de inmigrantes para ayudarnos a empujar el progreso. Mientras tanto la ciudad se partía en un Sur lleno de prosapia en decadencia y en un Norte barullero y ambicioso- Al Oeste en los lejanos suburbios, terminados en el Once, Palermo, la Recoleta, el malevaje hacía restallar su taquito pendenciero; Ahí nomás en Centroamérica, hoy Pueyrredón, comenzaba la llamada Tierra del Fuego, peligro seguro para cualquier hombre prudente. Pero volvamos al centro, a la calle Florida, porque es el centro y no de perímetro la inquisitiva curiosidad de Fray Mocho.
En la democrática Florida se apretujaban los lujosos cupés y landós con el proletario coche de plaza. Un tranvía decidido cruzaba su vértebra hasta Cangallo y luego seguía rumbo a Belgrano; tiempos en los que el modesto tranvía de caballo era un ejemplo de seguridad y rapidez. Un cronista autorizado, Taullard, relata que «paraban frente a cada casa donde lo pidiese un pasajero; y, lo que era más típico, los mayorales se creían obligados, por razones de elemental cortesía, a facilitar el descenso de las señoras de alguna edad, acompañándolas hasta la misma puerta de sus casas…»
En el aspecto social, las clases estaban más separadas que ahora y la pobreza no bien repartida; muchas veces eran los apellidos de dos cifras los que carecían de la plebeya solvencia monetaria y, a menudo, el deseo de figuración estaba tan falto de abolengo como de banca. Por las calles de la ciudad, vagos, niñas casaderas y empleados del gobierno aparentaban una grandeza imaginaria. Las páginas a llenar en esta acuarela de ridículo serían innumerables; la hija de estancieros oscuramente enriquecidos, que ignorante de sus antepasados, pregunta al tío, un criollo suelto, por la nobleza de la familia y se convence de que es mejor no hablar más del asunto; los dos tilingos que dialogan sobre los recién llegados a su inaccesible rango social y terminan ligándose a un mismo abono de teatro para mostrarse en todas la funciones, aunque en diferentes intervalos y sin preocuparse por la representación; los que vuelven de un viaje por Europa -ese prejuicio argentino- trayendo solamente los ademanes de la vida superficial (…) Los cuentos  de Cuadros de la Ciudad son verdaderas litografías que retienen a piedra los momentos de una clase social, ya en plena decadencia. Clase ociosa que casi nos pierde el país; por suerte los buques llegaban llenos de nuevas voluntades; por suerte quedaba todavía una reserva firme para el trabajo;  Por suerte las ideas de Sarmiento vigilaban el porvenir. Las entrelíneas de Cuadros de la Ciudad comunican el aire saludable de las soluciones adelantadas por el gran gobernante y son el mejor testimonio de una generación joven que supo reírse a carcajadas de una burguesía decadente que supo apuntar hacia el concepto dinámico de una nación….» (José E. Clemente. Prólogo del libro «Cuadros de la Ciudad» de Fray Mocho (José S. Älvarez)

1899. Foot-ball y Rugby, Molinos Metálicos, Circos y Payada, Caricatura Política, Tango y Amor, Vida Fácil y Barata, Comercio Exterior, Caso «Chile» Fin De Siglo
«Los clubes Buenos Aires Foot- ball Club, Atlético Rosario, Belgrano y Lomas, fundan la Unión Argentina de Rugby (…) el arribo de molinos metálicos, sustituyendo a los rudimentarios de madera, da a las zonas rurales un nuevo aspecto (…) una sensación de seguridad se desprende de hombres y animales  ante este aporte fundamental para el desarrollo campesino (…) Los circos recorren las llanuras llevando el espectáculo al corazón mismo de la pampa. Está en auge la payada, obtiene  sus primeros laureles Betinotti y surge una cantora de estilos y vidalas  que se dice discípula de Gabino Ezeiza; Aída Reina (…) La caricatura (…) con motivo del viaje de Roca se humoriza con las instrucciones  que éste deja al vicepresidente -Quirno Costa- (…) La portada de «Caras y Caretas», presenta a dos soldados de guardia a punto de reemplazarse «¿Cuál es la consigna?», pregunta el que entra. Y el que se va -Roca-, responde: «Hacer fuego sobre el que tenga cara de contribuyente y sablear (pedir) al que la tenga de banquero»(…) El tango no ha llegado todavía al centro, y se baila la polca militar. Los novios son muy vigilados, y en el orden matrimonial las desuniones son fenómenos rarísimos. Es cierto que se ocultan cosas. Pero el enfoque de la vida que tienen los porteños finiseculares, guarda cierta continuidad con lo español,  La vida es relativamente fácil y barata. Se beben muy buenos vinos extranjeros, y regalar flores parece monopolio argentino (…) Las cifras del comercio exterior recuperan el nivel que tenían en la víspera de la revolución del 90. Una década de exportación de carne dice de los siguientes envíos – en toneladas- Carne vacuna congelada y enfriada 2.784; ovina congelada y enfríada, 38.500; conservada 39.045. se produce durante este año una exportación extraordinaria de lana 237 millones de kilogramos.(…) Roca decide tomar el toro por las astas y provoca un encuentro con el presidente chileno Errázuriz, es para solucionar el caso «Chile». Ambos países armaron sus escuadras y dotaron a sus ejércitos de importante armamento, con la conferencia se logra un clima, cercano a la paz armada, pero alejado de cualquier conflicto mayor (…) Roca visita Río de Janeiro, iniciando una corriente de entendimiento latinoamericano(…)  El 31 de diciembre, se ríe mucho, algunos piensan en el fin del mundo (…) Ruidosamente, olvidando riñones, hígados, dolores de cabeza y otros males, los porteños dejan para el siglo próximo sus problemas de 90 años. Brindan con champagne «·Delbeck» o con oporto «Braganza». Algunos con cognac «Valdespino». pero los más eligen la ginebra de moda «Néctar».

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