En la reunión de este jueves en la Cooperativa convocada por el Síndico Jorge “Coki” Duarte, se conoció otro juicio más por parte del clan Rindfleisch a la CELO, esta vez de su esposa Nori Eichelt, quien está de licencia sin goce de haberes desde hace más de un año y que se desempeñara como Coordinadora en el Parque Termal durante varios años. La semana pasada hizo lo propio el ex gerente Alejandro de Paula en una demanda por 2 millones de pesos.

Al respecto, el vicepresidente de la CELO, Arnaldo Silvero explicó que Eichelt fue suspendida en febrero de 2015 por el Consejo de Administración de la Cooperativa por no rendir balances e informes respecto al parque termal, entre los que estaba el estado de la bomba de agua del Acuífero Guaraní que tiraba apenas un 20 % de su capacidad y no había notificado.

En la ocasión tuvo una sanción de cinco días, y luego pidió licencia por un año. En abril de este 2016 se le informó que estaba a su disposición el cheque por la cifra de 22 mil pesos, en concepto de haberes adeudados, pero ella decidió no cobrarlo argumentado que era menos de lo que le correspondía. Hace pocos días pidió que se le renueve la licencia por otro años más pero inició una demanda a la CELO por “daños morales y perjuicios” basados en la suspensión que considera injustificada argumentado que ella no sabía cuales eran sus funciones y los detalles técnicos que debió informar al Consejo “escapaba a sus funciones”.

Desde la Cooperativa efectuaron la respuesta legal pertinente, y analizan suspenderle la licencia pidiendo que se reintegre en su puesto de gerente en el término de 72 horas o renuncie, de lo contrario será considerado abandono del mismo ya que, hace poco Eichelt fue designada en un cargo provincial por el gobernador Hugo Passalacqua.

Despedir a la esposa de Rindfleisch implicaría un alto costo de indemnización para la Cooperativa indicó Silvero.

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